MADRID. Poco a poco, las cajas de ahorros extienden sus tentáculos fuera de España. Esta semana, Caixanova ha inaugurado su oficina en Sao Paulo (Brasil) y ha anunciado que también quiere estar en Buenos Aires (Argentina). Y ayer, la noticia la dio Bancaja, que ha abierto una oficina de representación en Lisboa. "Una plaza financiera y comercial estratégica para la entidad, debido a los enormes flujos y el constante incremento de la actividad comercial con el país luso", explicó Bancaja en un comunicado. Las funciones principales de la entidad serán la búsqueda y captación de operaciones comerciales con España y la gestión de clientes.