Rebaja hasta los 1.000 euros el tope de los pagos en metálicosEl Gobierno francés ha reducirá el máximo permitido para los pagos en metálico que efectúen los residentes en el país, y los dejará en 1.000 euros desde los 3.000 euros permitidos ahora, mientras que para los no residentes la cantidad se recorta desde los 15.000 euros a los 10.000. La medida, tal como explicó ayer el ministro de Finanzas y Cuentas Públicas, Michel Sapin, entrará en vigor en septiembre. Además, a partir del 1 de enero de 2016 el organismo francés de lucha contra el blanqueo y la financiación del terrorismo (Tracfin) será informado de forma automática de cualquier retirada de efectivo o depósito que supere los 10.000 euros al mes. En esta línea, todos los envíos de dinero a Francia que superen los 10.000 euros deberán ser declarados independientemente de cómo lleguen y se controlará la compra, la recarga y la utilización de las tarjetas prepago, que favorecen el anonimato. Por otro lado, a partir del próximo 1 de enero también será obligatorio presentar un documentado de identificación en las oficinas de cambios de divisas a partir de 1.000 euros, frente a los 8.000 euros marcados hasta ahora, y todas las cuentas serán inscritas en el Fichero Nacional de Cuentas Bancias y Similares. El Gobierno francés también se compromete a reforzar la vigilancia para todas las operaciones financieras, incluidos los préstamos al consumo y las transferencias internacionales, y ha decidido ampliar la congelación de activos por terrorismo a los bienes inmobiliarios.