El Ibex 35 sube un 1,57 por ciento en la semana y logra superar el techo de los 10.715 puntos, lo que abre la puerta a nuevas alzas hasta los 11.200 puntosNada como irse de fin de semana con expectativas positivas. Y si no, que se lo digan al mercado. Toda Europa se inundó de compras el viernes, después de que el portavoz del Gobierno griego, Gavriil Sakelaridis, afirmase que durante este sábado y domingo podrían ultimarse algunos detalles "técnicos" que permitirían llegar a un acuerdo con sus socios europeos el lunes. Pero si hubo una bolsa beneficiada, esa fue la española. El Ibex 35 protagonizó la mayor subida del Viejo Continente, un 1,68 por ciento, que le llevó a superar incluso la resistencia que presentaba a la altura de los 10.715 puntos; lo que abre, a su vez, la puerta hasta los altos del año pasado, los 11.200 puntos. Con el avance del viernes, el selectivo logró un alza del 1,57 por ciento en el balance semanal. Nada que ver con el arranque de semana, cuando la permanencia de Grecia en el euro se convirtió en la mayor preocupación del mercado. Sobre todo después de que el miércoles los ministros de finanzas de la eurozona no llegasen a un acuerdo para fijar las condiciones del rescate y la reestructuración de la deuda helena. Fue el día elegido, también, por Aena para protagonizar la mayor privatización en España en dos décadas, con una subida del 27 por ciento desde el debut. Por suerte, el jueves, sólo un día después, cuando el mercado debía asimilar la falta de entendimiento entre Grecia y el Eurogrupo, el Banco Central Europeo elevó la ayuda de emergencia a la banca griega -en 5.000 millones de euros-, hasta los 65.000 millones. Y a ello se unió, también, otra noticia positiva: el alto el fuego en Ucrania anunciado por el presidente de Rusia, Vladimir Putin. Claro que la oleada de compras no se limitó a España. En el resto de Europa, el escenario también fue similar, incluso en la bolsa griega -el Fste Ase 20 recuperó el viernes niveles previos a las elecciones-. El Dax, por otro lado, llegó a superar los 11.000 puntos a lo largo de la sesión del viernes por primera vez en su historia ante un dato de PIB mucho mejor de lo esperado -los perdió al cierre-. Pero no fue el más alcista de la semana, subió un 1,08 por ciento. Ese lugar lo ocupó Italia, entre las principales plazas europeas, que avanzó un 2,25 por ciento. Al otro lado del Atlántico, Wall Street también cerró una semana en verde. Mientras el Dow Jones subió en torno a un 1 por ciento, el S&P 500 volvió a revalidar nuevos máximos con alzas semanales próximas al 2 por ciento al cierre del mercado europeo. Sin sobresaltos... salvo en el petróleo Más allá de la renta variable, en el mercado de renta fija la prima de riesgo española rompió el viernes con la racha de seis días consecutivos de subidas (la más larga desde marzo de 2013) al bajar 9 puntos básicos, hasta los 121 puntos. No obstante, en el conjunto de la semana ascendió 10 puntos. También lo hizo la rentabilidad del bono español a una década, que en cinco días ha subido del 1,48 por ciento al 1,55 por ciento, mientras que la del bund ha disminuido del 0,37 al 0,34 por ciento en el mismo periodo. Quien dio la sorpresa el viernes fue el petróleo de referencia en Europa, el Brent, que se anotó su segunda mayor subida diaria desde 2009 al avanzar casi un 8 por ciento -recupera ya un 31 por ciento desde mínimos-, después de que petroleras como Total o Apache avisasen de que invertirán menos, además de indicadores que apuntan al menor uso de plataformas petrolíferas. El West Texas subió otro 2,28 por ciento en cinco días. El euro también consiguió avanzar hasta los 1,14 dólares. De hecho, vivió su tercera semana seguida de alzas, lo que no pasaba desde marzo de 2014.