Si hace unos meses el aumento del número de pasajeros era pausado y obligó a compañías aéreas, empresas de autobuses y al ferrocarril, a ofertar menos plazas o a precios más bajos por la disminución de la demanda; en 2014 la situación va cambiando progresivamente, y aunque aún es pronto para lanzar las campanas al vuelo y los responsables de las sociedades de transporte de pasajeros en España mantienen un discurso de "precaución", lo cierto es que el sector está recuperando su viveza. Por ejemplo, Air Europa, de la mano de ese viejo zorro que es Pepe Hidalgo, se está convirtiendo en uno de los referentes de la aviación española, mientras que Iberia, que ha cambiado de máximo responsable con el relevo de Antonio Vázquez por Luis Gallego, y que abandonó varias rutas, en el último trimestre del año va saliendo de los peligrosos números de ingresos que tenía, y parece que está retornando a la buena senda. Su filial de bajo coste, Iberia Express, con Fernando Candela a la cabeza, está afianzándose, cada vez más, en el mercado de corto y medio radio. La incorporación al grupo IAG (Iberia y British Airways) de Vueling está potenciando el sector. Ahora sólo falta conocer cuándo su directiva, presidida por Álex Cruz, da más importancia a algunos aeropuertos nacionales. Las aerolíneas de matriz foránea, pero que operan en España, como Lufthansa, Air France-KLM o Singapore Airlines, están desarrollando una amplia actividad de conectividad entre diversos aeropuertos españoles y sus hubs internacionales en Munich o Frankfurt, París o Amsterdam, y Singapur, de la mano del conocimiento del poder del mercado español que tienen sus responsables en la Piel de Toro. En cuanto a los transportes terrestres, Renfe Operadora se ha beneficiado en las líneas de Alta Velocidad de la aplicación de una serie de reducciones en sus tarifas y ofertas que le han permitido sumar viajeros en detrimento de los medios de transporte de personas por carretera. Su nuevo presidente, Pablo Vázquez, por salida del anterior para un cargo mucho más elevado en el Ministerio de Fomento, mantiene ese criterio en una situación en la que se está preparando la apertura a la liberalización de una de las líneas Ave, la del Corredor de Levante. Esta bajada de tarifas ha impactado en las compañías de autobuses, como es el caso de Alsa, que con Javier Carbajo a la cabeza, lo ha sabido minimizar con sus servicios intermodales, como por ejemplo el enlace con el aeropuerto de Madrid-Barajas (Adolfo Suárez). No obstante, desde las patronales del sector de la carretera, Asintra y Fenebús, que se han fusionado en el último trimestre del año, creando Confebús, se ha pedido en reiteradas ocasiones que se lleve a cabo, por parte de las autoridades correspondientes, el ajuste necesario para que la competencia sea leal y no tan desleal como a su juicio es entre la carretera y el ferrocarril en la actualidad.