Las películas nacionales recaudan 123 millones en 2014, un 75% más que hace un año y se comen el 25,5% de la taquillaEl cine español cosecha el mejor año de su historia en cuanto a recaudación y espectadores en medio de una crisis presupuestaria y de rentabilidad. Según los últimos datos publicados por Fapae, la confederación que engloba a los productores audiovisuales, las películas nacionales han logrado una taquilla récord con una facturación de 123 millones de euros frente a los 119,8 millones de euros de 2012, que fue la más alta hasta ahora gracias al estreno de Lo Imposible y Tadeo Jones. Con respecto a 2013, los ingresos del cine español crecieron un 75,5 por ciento, mientras que el número de espectadores se ha disparado un 89 por ciento hasta los 20,8 millones. El incremento de la facturación ha llevado a las películas españolas a lograr en 2014 la cuota de taquilla más alta de los últimos 37 años: un 25,5 por ciento del total, según los datos de Rentrak. En 2013, el cine español apenas se comió el 13,9 por ciento de la tarta y en 2012 logró el 19 por ciento de la taquilla total. El protagonista indiscutible del récord histórico de recaudación es Ocho apellidos vascos. La película de Mediaset ha logrado vender desde su estreno entradas por 56 millones de euros, el 45 por ciento de la recaudación total. En el ranking de largometrajes españoles más vistos del año, El Niño, también de Mediaset, ocupa la segunda posición con 16,2 millones de euros de recaudación. Le sigue Torrente 5: operación Eurovegas con 10,7 millones y La isla mínima con 6 millones. Ramon Colom, presidente de Fapae, se ha mostrado encantado con el balance del año y ha asegurado que "los productores están contentos por haber conseguido conectar con el público". A su vez, y a través de una nota de prensa, ha querido agradecer el "papel fundamental" de las cadenas de televisión "en el éxito de la producción y de la promoción que ofrecen". Pero no todo no son buenas noticias para los productores, que ven en Ocho apellidos vascos "un éxito difícil de repetir". A pesar de los buenos resultados cosechados por el filme revolución de la temporada, los productores aseguran que es muy complicado rentabilizar la inversión en cine, mientras critican que las ayudas del Estado no llegan y las exenciones fiscales "se han quedado a mitad de camino". En este sentido, los productores y directores critican que cada vez hay menos presupuesto para rodar un largometraje y que si tras el filme esta RTVE, la promoción es nula.