La agencia de empresas de economía colaborativa se desmarca de los intereses de la aplicación de transporteLa Comisión Europea (CE) analizó ayer la prohibición del servicio de Uber en España y exigió a las autoridades españolas que cualquier medida para regular esta aplicación de transporte de pasajeros debe respetar los principios de proporcionalidad, no discriminación y libertad de establecimiento. "Tomamos nota de lo que está pasando ahora en España y para nosotros es importante no prohibir completamente nuevas tecnologías sólo porque son nuevas, aunque somos conscientes de que deben cumplir las regulaciones de los Estados miembros", dijo el portavoz de Transportes del Ejecutivo comunitario, Jakub Adamowicz. El Ejecutivo comunitario aseguró que "no hay legislación de la UE sobre Uber" y que por tanto "la provisión de servicios de taxi es actualmente competencia de los Estados miembros". Por su parte, fuentes de Uber criticaron la decisión judicial al considerar que el "fallo es incompatible con el amplio reconocimiento político tanto en España como en la UE a los beneficios de compartir recursos y la economía colaborativa, en un momento de alto desempleo y de recuperación económica delicada." La plataforma Cabify, empresa española que ofrece soluciones de movilidad urbana, se desmarcó de los argumentos y operativa de Uber al indicar que sus servicios de transporte urbano cumplen la normativa vigente y ofrece "todas las garantías de seguridad" a conductor y pasajero. Lo mismo hizo la recién creada plataforma de la economía colaborativa Sharing España, que integra a 26 empresas del sector -Social Car, Alterkeys, Comunitae y Efece entre ellas- que se alejó de la polémica suscitada por las medidas cautelares contra Uber. Su director, José Luis Zimmermann, dejó claro en la presentación a los medios de esta iniciativa que la empresa norteamericana no forma parte de la plataforma. Preguntado por su posible incorporación, declinó valorar ese extremo.