Competencia dilatará su visto bueno hasta el segundo trimestre del próximo añoLa nueva Comisión de Competencia se ha propuesto estrenarse en el cargo con buen pie y para ello prevé meditar a conciencia una de las decisiones más relevantes del sector de las telecomunicaciones: la compra de Jazztel por parte de Orange, actualmente en trámite de una amistosa oferta pública de adquisición. El departamento que dirige Mar-grethe Vestager promete tomarse el tiempo que sea necesario para analizar la integración prevista en suelo español. Al contrario de lo que hasta el momento presuponían los analistas, el visto bueno a la operación no se realizará de manera casi inmediata en la denominada Fase I, sino que deberá superar los trámites, plazos y requisitos propios de la Fase II. Eso significa que la adquisición no se podrá formalizar en el calendario inicialmente estimado (primer trimestre de 2015), sino que se demorará durante tres meses, hasta el segundo trimestre del próximo año, siempre que en ese tiempo no se produzcan nuevos retrasos. Fuentes de Orange consultadas ayer por este periódico declinaron realizar comentarios. Sin embargo, según ha podido saber elEconomista de otros expertos conocedores de la situación, Bruselas decidirá mañana dos asuntos de trascendental importancia para el destino de Orange y Jazztel. La primera cuestión consiste en determinar si la consolidación en ciernes la analizará la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), tal y como había solicitado el regulador español el pasado 5 de noviembre. La Comisión Europea ya apuntó en un comunicado que "tras un examen preliminar, considera que la operación podría entrar en el ámbito de aplicación del Reglamento de concentraciones", si bien se reservó su decisión definitiva al respecto hasta la reunión prevista para mañana jueves. Los expertos consultados por este periódico dan por hecho que la CNMC no ganará el caso, sino que la integración de Jazztel en Orange será digerida desde los organismos de competencia comunitarios. Tampoco parece que existan especiales problemas para que la compra obtenga la aprobación final de Bruselas en la referida Fase II, aunque para ello Orange tendría que realizar ciertas concesiones en el mercado de ADSL. De concretarse mañana esta situación, los accionistas de Jazztel pueden estar seguros de que la aprobación por parte de Bruselas se demorará un máximo de 90 días laborales, por lo que no podrán ingresar los 13 euros por título ofertados por Orange hasta la formalización de la compra. Es decir, ese pago podría demorarse hasta finales de abril o principios mayo de 2015, una vez resueltos todos los escollos regulatorios y formalismos normativos. Espejo de Vodafone-Ono Los expertos del mercado consideraban meses atrás que la compra de Jazztel por parte de Orange correría la misma suerte que la adquisición de Ono por Vodafone. A priori no existen solapamientos importantes entre las dos compañías que pongan en peligro el desarrollo normal del mercado. También se percibía con buenos ojos una integración que ayudaría a incrementar la competencia con los dos principales operadores europeos: Vodafone y Telefónica.