Una de las medidas estrella de este año es la limitación de las comisiones máximas de los planes de pensiones, que han bajado del 2% al 1,5%. Aún así, después de su entrada en vigor, la mitad de los productos se mantiene en el tope legal impuesto por el Gobierno y, si se analizan los costes medios de gestión, los planes de pensiones siguen siendo más caros que los fondos, a pesar de la reformaEl plan de pensiones es el producto por excelencia de ahorro para la jubilación. Uno de sus mayores reclamos es que cuenta con la ventaja fiscal de la desgravación, que lo hace más atractivo a ojos de los inversores. Sin embargo, además de que no es la única alternativa que hay en el mercado, es una opción que sigue saliendo cara al partícipe a pesar de las últimas reformas del Gobierno para rebajar sus comisiones. De hecho, los excesivos costes de gestión que soportan estos productos son uno de los históricos reclamos de los partícipes. Los datos así lo avalan, ya que las reclamaciones por planes de pensiones crecieron un 61 por ciento durante el año pasado, con respecto al ejercicio anterior, según los datos de la Dirección General de Seguros. Un descontento que llevó al Gobierno a plantear en noviembre del año pasado el borrador de la nueva ley de pensiones y seguros que se confirmó por un real decreto el pasado mes de agosto. El mismo daba un plazo de dos meses a las gestoras para bajar la comisión máxima de gestión al 1,5 por ciento, desde el 2 por ciento anterior. Pues bien, el plazo fue agotado prácticamente por la mitad de las gestoras, que hasta el último día cobraron el límite legal máximo. Ahora, son muchos los que también sitúan su coste de mantenimiento en el nuevo tope. En concreto, un 49,5 por ciento de los planes que se comercializan en España tiene una comision de gestión anual del 1,5 por ciento; un 35 por ciento la sitúa entre el 1 y el 1,5 por ciento; y el 15 por ciento restante por debajo del 1 por ciento. Y por categorías, un 77 por ciento de los planes de bolsa tiene el máximo coste del 1,5 por ciento; un 63 por ciento de los mixtos; un 39 por ciento de los de renta fija; un 39 por ciento de los garantizados y un 12 por ciento de los monetarios. Siguen más caros que los fondos Para que se haga una idea, si se calculan las comisiones medias, lo cierto es que pese a esta rebaja, los planes de pensiones siguen siendo más caros que los fondos de inversión. Y eso a pesar de que su coste de gestión es muy inferior al de estos últimos, donde el límite se encuentra en el 2,25 por ciento. Pues bien, según los datos de Morningstar, los primeros tienen un coste medio del 1,22 por ciento, frente al 1,05 por ciento de los segundos; esto es, un 17 por ciento más -ver gráfico-. La sorpresa es mayúscula cuando se realiza este mismo ejercicio por categorías. Sobre todo, en los productos de menor riesgo, como los garantizados o los de renta fija, que acaparan el 52 por ciento de los partícipes de planes de pensiones, según los datos de Inverco. La mayor diferencia se da en los monetarios, que hay que recordar que son productos que tienen una rentabilidad ligada, sobre todo, a los tipos de interés, que ahora están en el 0,05 por ciento. Por ello, sorprende que la media, según los datos de Morningstar, tenga una comisión del 0,98 por ciento, por encima del 0,53 por ciento de los fondos de inversión. Es decir, un 45 por ciento más. También se ve una brecha importante en los productos de renta fija, ya que mientras el coste de gestión es del 0,79 por ciento en fondos, en planes de pensiones asciende al 1,17 por ciento. Le siguen los garantizados, donde la comisión media es del 1,08 por ciento en fondos por debajo del 1,26 por ciento de los planes. Y los mixtos, donde se sitúan en el 1,20 por ciento frente al 1,33 por ciento de la media de planes. La única excepción es la bolsa, donde los planes de pensiones tienen, de media, un coste inferior al de los fondos: del 1,39 por ciento frente al 1,65 por ciento. Es cierto que en muchos casos un mayor coste justifica una mayor calidad de gestión. Al menos así lo defienden desde la patronal de fondos y planes de pensiones, Inverco. El problema es que no ocurre así siempre. Por ejemplo, los diez planes de renta fija más rentables de la última década precisamente no son los que tienen un mayor coste de mantenimiento, sino todo lo contrario, inferior al 1,3 por ciento. Y solo cuatro de los 20 más rentables a diez años tiene la máxima comisión. Es decir, que en líneas generales la mayoría de los que tienen el coste más alto está entre las peores rentabilidades a diez años. En los mixtos, cinco de los diez más rentables de la última década tiene el coste máximo. Mientras que en los garantizados son tres de los diez más rentables en el mismo plazo; y en los monetarios, ninguno. El sector reclama más medidas Paula Mercado, directora de análisis de VDOS, asegura que "las comisiones en planes de pensiones son bastante elevadas, si consideramos las rentabilidades medias de las categorías, pero esto está cambiando con la nueva normativa". En este punto surge la siguiente duda ¿son suficientes estas medidas? Jon Aramburu, director general de Loreto Mutua -la mutualidad del sector aéreo-, afirmaba en una reciente entrevista a elEconomista: "Creo que deberían bajar aún más el límite de comisión. Es un tema vital a largo plazo y fundamental, porque en unas aportaciones que deberían ser de 30-35 años, lo que es una vida laboral, drenan muchísima rentabilidad. A la gente se le cobra porque no conozca esto, porque si no lo haría él. Nosotros les debemos dar un servicio por un precio razonable, porque este producto ata durante mucho tiempo, en el mejor de los casos hasta la jubilación".