En septiembre aterrizaron en el país cuatro nuevos fabricantes: Hyundai, Kia, BMW y Mercedes-Benz México tiene todo a su favor para convertirse en el Pequeño Detroit de Latinoamérica en el plazo de cinco años. En ello influyen los sigueintes factores: el crecimiento de la producción nacional automovilística, que el año pasado reportó cifras históricas y que al cierre de agosto de 2014 mantienen a México como el productor número uno de Latinoamérica, por encima de Brasil; la constante inversión extranjera recibida por esta industria, que en los últimos dos años y medio suma más de 6.000 millones de dólares, y el modelo de negocios orientado a la exportación. Una publicación de BBVA Research destaca que a 20 años del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la industria automovilística en México se ha convertido en una competitiva plataforma de exportación para Estados Unidos y el resto del mundo. Los más de 40 tratados de libre comercio que tiene México orientan al modelo de negocios de la industria automotriz mexicana principalmente hacia a la exportación (80 por ciento), y son también el motor de atracción para que los fabricantes de diferentes partes del mundo comiencen a volver hacia el territorio azteca con mayores inversiones. De hecho, hasta el mes de septiembre se sumaron cuatro nuevos jugadores al mercado mexicano: las coreanas Hyundai y KIA (en Nuevo León) y dos alemanas premium: BMW (en San Luis Potosí) y Mercedes-Benz (Aguascalientes), que se suman a los planes de Audi, otra marca de lujo que ya levanta su planta en Puebla. Creación de 'clusters' Alrededor del 80 por ciento de los vehículos que las marcas producen en México se exporta, porque además de los TLCs la ubicación geográfica del país, pegado al mercado más grande del mundo, es también un poderoso atractivo que fortalece el modelo de exportación adoptado por México con la creación de clusters, un esquema similar al de Detroit, cuna de las marcas Chrysler, General Motors y Ford. De acuerdo con el último reporte de Promexico, en 2012 la industria automotriz terminal atrajo 803,7 millones de dólares, en 2013 la cifra creció a 1.855 millones de dólares y en el primer trimestre de 2014 asciende a 938,2 millones de dólares; a estos habría que agregarle los mil mdd que en el segundo trimestre anunció Hyundai, 1.300 millones de dólares de la alianza Nissan-Mercedes-Benz, 1.100 millones de BMW y recientemente los casi 2.500 millones de dólares de KIA. Analistas y trabajos de investigación del sector automotor destacan las ventajas que México tiene, no sólo sobre las economías emergentes, también sobre las naciones desarrolladas, para consolidarse, en el corto plazo, entre las naciones con mayor potencial en la industria automotriz. "En cinco años, México se consolidará como el productor número uno de Latinoamérica, por delante de Brasil, porque las recientes noticias de Honda, Hyundai, Nissan con Mercedes-Benz, BMW y KIA, que quieren invertir y producir vehículos aquí, son excelentes noticias para México", comenta José Maria Pertusa, consejero delegado de Carmudi México. El más reciente reporte de la Organización Internacional de Constructores de Automóviles (OICA), revela que en 2013 México se ubicó como el octavo productor mundial con 3,52 millones de unidades, arriba de países con tradición como Reino Unido, Francia y España. En una entrevista conjunta con José María Pertusa y Felipe Platas, gerente de Contenido de Carmudi, ambos coinciden en señalar que en el exterior ven a México como una futura potencia de la industria automotriz, porque ha sabido emular muy bien el diseño de negocio de Detroit. Ese estado de la Unión Americana es reconocido mundialmente como la capital más importante de la fabricación de autos y el modelo de negocio que sigue México es exactamente el mismo, se llama clúster, y fue popularizado por el profesor Porter, en Harvard. En ese sentido, Felipe Platas menciona que la teoría de Porter no concibe a las empresas como una cosa aislada, sino como un ecosistema en donde conviven las empresas de fabricación con todas las demás que aportan componentes, incluso aquellas que dependen del sector público como las que se encargan de la infraestructura. Pertusa, por su parte, apunta que México no puede ser considerado como un clúster, pero menciona a dos estados "que lo vienen haciendo espectacularmente bien": Guanajuato, con marcas como Honda, GM, Volkswagen y Mazda, y Puebla, que ha empezado muy bien con Volkswagen y en breve Audi, "ambos siguen el mismo modelo que Detroit y el cual con toda seguridad se consolidará y se expandirá en el país", subrayó. En entrevista con Guillermo Rosales, director general adjunto de AMDA, destaca que el fortalecimiento del sector y la llegada de nuevas plantas al país, obedecen en gran parte a que las armadoras han sabido aprovechar las facilidades que brindan los gobiernos locales a través de infraestructura básica como los parques industriales y acceso a la logística necesaria en corredores como el Bajío (Querétaro, San Luis Potosí y Aguascalientes) y al norte en Ramos Arizpe, Coahuila, Hermosillo y Sonora, sin dejar de lado el desarrollo de Volkswagen en Puebla. Entrevistado desde las oficinas de Carmudi en la ciudad de México, Pertusa insiste en el prometedor futuro que le espera a la industria del motor, a pesar de que las cúpulas como las asociaciones mexicanas de la Industria Automotriz (AMIA) y la de Distribuidores de Automotores (AMDA) recortaron su estimación de ventas internas para este año (de un 1,12 millones de unidades a un 1,10 millones de autos), por la débil recuperación del mercado doméstico. México superará a Brasil Cabe mencionar que, en el primer semestre de 2014, las ventas del mercado local acumulaban una caída de 0,3 por ciento (1.627 vehículos menos que en el mismo periodo 2013), sin embargo las recientes modificaciones que se aplicaron al programa Hoy no Circula, reviven las expectativas de AMIA y AMDA para revertir esa tendencia negativa. Al cierre de agosto, comienzan a verse los resultados, con 700.452 unidades vendidas en los primeros ocho meses, un 3.5 por ciento más que en el mismo periodo de 2013, cuando se comercializaron 676.974 autos. "La proyección de 8 por ciento entre 2013 y 2018 no es una cifra espectacular, pero el nivel es bueno en comparación con otros países emergentes", expone José María Pertusa.