El empresario asturiano, de 79 años, falleció en Madrid víctima de una "crisis cardíaca inesperada"Dimas Gimeno, 'número 2' del gigante de la distribución, se perfila como nuevo presidenteEl Corte Inglés y la aristocracia empresarial española están de luto. A primera hora de la tarde de ayer falleció Isidoro Álvarez, de 79 años, presidente del gigante español del comercio y referencia de empresa familiar de éxito. El directivo estaba al frente del grupo de grandes almacenes desde hace 25 años, cuando tomó el relevo del que fuera el segundo presidente de la empresa, su tío Ramón Areces, cofundador de la misma junto a César Rodríguez. Según un comunicado remitido por El Corte Inglés, Isidoro Álvarez falleció "víctima de una crisis cardíaca inesperada", derivada de una insuficiencia respiratoria. En el mismo texto, la empresa de distribución informó de la instalación de la capilla ardiente en el Fundación Ramón Areces, en la calle Vitrubio 5 de Madrid, ayer domingo desde las 20 a las 22 horas, y hoy lunes entre las 10 horas y 14 horas. Tras el fallecimiento de Álvarez, la nueva etapa de El Corte Inglés promete caer ahora en manos de la cuarta generación del clan familiar, posiblemente en la persona de su sobrino Dimas Gimeno, de 40 años, desde agosto de 2013 consejero director general del grupo, número dos ya por lo tanto y con media vida de experiencia directiva en la compañía. Si se confirmara su nombramiento, Gimeno estaría acompañado, en cualquier caso, por Manuel Pizarro, el expresidente de Endesa que fue fichado el pasado mes de julio como adjunto al presidente y que en la junta de accionistas celebrada el pasado 31 de agosto fue nombrado consejero. A diferencia del Banco Santander, al no ser una empresa cotizada, El Corte Inglés no tiene en cualquier caso la presión ni la prisa por nombrar un sustituto. Deberes hechos Álvarez se marcha además con los deberes hechos. Durante su gestión el grupo ha diversificado el negocio, con el lanzamiento de marcas como Opencor, Supercor Bricor o Sfera, además de la consolidación de Hipercor, la cadena de hipermercados lanzada en 1980, tan sólo 9 años antes de su llegada a la presidencia. Todo ello al margen de haber iniciado en Portugal el salto al mercado internacional, con la apertura de grandes almacenes en Lisboa y Oporto y con las cuentas saneadas. Para ello, a lo largo de 2013, el grupo ha llevado a cabo tres operaciones financieras. En primer lugar, el pasado mes de noviembre culminó la refinanciación de su deuda bancaria con 27 entidades, firmando un préstamo sindicado de 4.909 millones. Asimismo, lanzó la primera emisión de bonos de su historia, por importe de 600 millones de euros, y vendió el 51 por ciento del capital de Financiera El Corte Inglés al Santander, lo que le permitió dejar de consolidar en sus cuentas el pasivo de la misma. "Todo ello pone de manifiesto la capacidad de reacción y la solvencia del Grupo El Corte Inglés , que ha conseguido una mayor flexibilidad y una mejora de su estructura financiera", explican en la empresa. El gran reto pendiente, que Álvarez no podrá ver cumplido, es el de la salida al exterior, más allá de Portugal. Y es que la salud del hasta ahora presidente de El Corte Inglés se complicó gravemente la madrugada del pasado miércoles, cuando ingresó de urgencia en el Hospital Universitario Puerta de Hierro de Majadahonda (Madrid) por problemas respiratorios. Ese mismo día falleció Emilio Botín, presidente del grupo Santander, también de 79 años, con la consiguiente conmoción de la clase empresarial, financiera, política y académica española. Última aparición pública La última aparición pública del empresario asturiano se produjo el pasado 31 de agosto, con motivo de la junta general de la compañía y fecha de presentación de los resultados de la mayor cadena de grandes superficies de Europa por ingresos y la tercera en el mundo. Sus ventas en 2013 llegaron a 14.552 millones de euros, apenas un 1,8 por ciento menos que el año anterior, a pesar de la fuerte competencia del sector y la generalizada reducción del consumo en España por motivos de la crisis económica. Esas dificultades no impidieron a El Corte Inglés seguir creciendo en beneficio, con un repunte del 6,2 por ciento, hasta los 174,5 millones. Álvarez ha sido responsable de un modelo de gran empresa que durante décadas abanderó la marca España. Su gestión se ha distinguido por la innovación, la diversificación de productos y servicios y la apuesta por los espacios comerciales más relevantes de la mayoría de las capitales de provincia. Las primeras reacciones sobre el adiós de una de las personalidades más relevantes de la vida empresarial y económica del país durante el último cuarto de siglo no se hicieron esperar. Siempre en un discreto segundo plano, el empresario ha sabido conducir el gigante empresarial con el espíritu de sus fundadores, con rigor, sentido común y espíritu emprendedor, dándole un nuevo impulso, definitivo para su consolidación. A los pocos minutos de confirmarse el fallecimiento, el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, trasladó su pésame a la familia y empleados de El Corte Inglés. También otros empresarios y políticos mostraron sus condolencias por medio de las redes sociales.