Las partes confían todavía en alcanzar un acuerdo, pero en el mercado se asegura que la operación está paralizadaLas conversaciones entre Repsol y la canadiense Talisman Energy parecen haberse enfriado, de acuerdo a personas cercanas a las negociaciones que inciden en que todavía es posible lograr algún tipo de acuerdo. El consejero delegado de la petrolera con sede en Calgary, Hal Kvisle, quien tiene previsto abandonar su puesto a finales de este año, tiene intención de vender activos de la compañía, o incluso su totalidad, si se produce una oferta sugerente. Según adelantaba ayer el Wall Street Journal, desde el comienzo de la posible compra por parte de la española del negocio de crudo y gas natural de Talisman, las acciones de la canadiense se han revalorizado considerablemente. Sin embargo, fuentes aseguraron al rotativo que un posible acuerdo "no está muerto" pero que las conversaciones se han "estancado". "La compra de Talisman está efectivamente parada", dijo una de las fuentes. "El obstáculo principal son los activos del mar del Norte", señaló otra. Un portavoz de Repsol no hizo comentarios sobre este asunto. La dirección previa de Talisman Energy, recordemos que Kvisle tomó posesión de su cargo en septiembre de 2012 con el objetivo de poner en orden la empresa, optó por una expansión internacional que endeudó severamente a la compañía. Desde el desembarco de su actual consejero delegado, la entidad ya ha vendido parte de sus activos de gas al oeste de Canadá y negocios en Colombia. Planes de Repsol Por su parte, Repsol se ha mostrado dispuesto a equilibrar su producción con sus actividades de exploración de crudo y gas natural con una expansión en países desarrollados y políticamente estables. En cierta forma la española, que quiere dar salida a la abundante caja obtenida con su salida de Argentina, lleva meses buscando oportunidades de adquisición en países de la OCDE que rellenen el hueco dejado por la argentina YPF en el área de producción y exploración. Aún así, es cierto, que Talisman Energy está teniendo dificultades para deshacerse de sus activos menos apetecibles, en el norte de Irak, por ejemplo. La canadiense también cuenta con activos energéticos en Estados Unidos, en áreas tan atractivas como Marcellus y Eagle Ford, dos formaciones de gas y crudo de esquisto bituminoso. Las operaciones globales de Talisman incluyen atractivos activos generadores de caja en el sureste asiático, pero los del mar del Norte, muchos de los cuales explota a través de una sociedad conjunta con la china Sinopec, han incumplido sistemáticamente los objetivos de producción y lastrado sus cuentas. Dadas las últimas oleadas de violencia por parte de los militantes del Estado Islámico (EI), sus operaciones en el Kurdistan se han convertido en un verdadero lastre para la canadiense, mientras que en Colombia, la empresa presentó una solicitud de fuerza mayor ante el estado con el fin de poder suspender parte de sus operaciones. Talisman ha reiterado su plan de vender aproximadamente 2.000 millones de dólares estadounidenses (1.500 millones de euros) en activos durante los próximos 12 a 18 meses. La canadiense registró pérdidas de 237 millones de dólares en el segundo trimestre, frente al beneficio de 97 millones en el mismo periodo de 2013.