La consultora IMS cifra el impacto negativo para los laboratorios en 195 millonesEl Gobierno ha aprobado una nueva Orden de Precios de Referencia, que fija el importe al que se tienen que comercializar una serie de medicamentos que financia el Estado a través de la Seguridad Social. La corrección en los precios de estos fármacos, entre los que se incluyen algunos tan comunes como el Ibuprofeno, el Paracetamol o la Amoxicilina, supondrá un impacto negativo para los laboratorios de 195 millones de euros y de 308 millones para las farmacias, según los cálculos de la consultora IMS, experta en el sector sanitario. Estas cifras contrastan sin embargo con las cuentas que ha presentado al respecto el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, que asegura que el impacto será de 43 millones de euros para las farmacias. El sector, que da como válidos los datos de la consultora, ya ha presentado distintos recursos contencioso-administrativos contra el Real Decreto que recoge esta Orden, a través de las patronales como Farmaindustria, Fedifar (distribución) y las oficinas de farmacia (FEFE). Todos ellos respaldan el informe de IMS, "que se ajusta más a la realidad", frente al del Ministerio, ya que aseguran que este último no incluye nunca en sus cálculos la parte de esos medicamentos que se comercializa a través del mercado privado (compra sin receta o con receta de un médico privado). "El Ministerio no incluye nunca en sus cálculos el 20 por ciento de las unidades de los productos afectados que se dispensan con cargo al mercado privado, a pesar de estar obligado por la normativa de la Unión Europea", indican. Asimismo, aseguran que el Real Decreto contiene otros defectos, como la carencia de una memoria económica, ya que toda norma que suponga un impacto económico tiene que llevarla. Según FEFE, el ministerio explicó que esta memoria aparecería con la Orden de Precios, pero esto no ha sucedido y ahora asegura que "no hacía falta", indican fuentes de la industria a este periódico. El informe de la consultora IMS también contabiliza el impacto diferenciando entre medicamentos genéricos y medicamentos de marca. Estos últimos son los más afectados "al soportar el 67 por ciento del impacto de la Orden, lo que disminuye su valor en 192 millones a PVL (precio de venta libre), el que afecta a los laboratorios. Por su parte los genéricos "solo pierden el 9 por ciento, unos 54 millones". En estas caídas se incluyen también las bajadas voluntarias de precios del 30 por ciento.