Acumula unas deudas de 12 millones y busca una quita para seguirFotoprix, cadena de tiendas de fotografía, que actualmente emplea a unos 400 trabajadores, ha presentado suspensión de pagos en un juzgado barcelonés con unas deudas de 12 millones de euros. La intención que persigue la empresa con esta medida es aprobar un plan de pagos, con una quita importante, para poder seguir ejerciendo su actividad. Fotoprix era la única de las grandes del sector que había logrado sobrevivir al cambio digital. Responsables de la compañía fotográfica justifican su declaración de insolvencia por la larga crisis que está atravesando el sector, debido al éxito de la fotografía digital, el peso del endeudamiento derivado de las inversiones realizadas para adaptarse a esa transformación y a la actitud negativa de la banca. Desplome de ventas Fotoprix llegó a contar con 300 establecimientos en España, entre centros propios y franquiciados, y hoy posee 95 tiendas en propiedad y 70 franquicias; mientras que la plantilla, que alcanzó las 700 personas, se sitúa ahora en unas 400. El tremendo repliegue sufrido obedece al desplome de las ventas, que han pasado de los más de 80 millones del 2009 a los apenas 40 millones del pasado ejercicio. En su demanda de solicitud de concurso, la empresa, que está asesorada por Carlos Noguera y Laura Suárez, del bufete Pintó Ruiz & Del Valle, ha declarado deudas por un importe de 12 millones de euros, de los que casi la mitad son con la banca y, en concreto, las entidades más afectadas son BBVA, Banco Popular, Sabadell, Bankinter y Deutsche Bank. Entre los acreedores importantes también figuran las administraciones públicas: la Agencia Tributaria con 2,5 millones de euros y la Seguridad Social, con 0,5 millones. La intención de la empresa es negociar con los acreedores, aprobar un plan de pagos con una quita importante e intentar continuar.