leipzig. Protegida detrás de una vitrina de cristal blindado, brilla con luz propia ante las miradas de decenas de visitantes, que no se cansan de admirarla desde todos los ángulos. No estamos en el Museo parisino del Louvre, sino en la Games Convention, feria que se celebra en la ciudad alemana de Leipzig entre el 23 y el 27 de agosto. Y el objeto del deseo no es la Mona Lisa, sino la consola PlayStation 3.Para un lego en la materia resulta difícil entender qué tiene de especial esa caja negra y rectangular, pero Christof, un chaval alemán que no para de hacer fotos con su teléfono móvil, se apresura a explicarlo. "Es increíble tenerla delante", asegura. "Claro que hubiera preferido jugar con ella, pero me conformo con poder verla antes de noviembre".Será entonces cuando salga al mercado la tercera generación de consolas de Sony y de forma prácticamente simultánea lo hará también la nueva consola de Nintendo, también llamada Wii.Los dos gigantes nipones aprovechan la Games Convention, la mayor feria del entretenimiento interactivo de Europa, para abrir boca ante sus próximos estrenos. Esperan reducir distancias con Microsoft, que comercializa su Xbox360 desde finales del año pasado, y para ello se apoyan en nuevas prestaciones.PlayStation3PlayStation3 apuesta por la conquista del cuarto de estar con un procesador que multiplica las utilidades, mucho más allá de los simples videojuegos, y ofrece una gráfica apabullante. Tiene potencial para convertirse en "la plataforma central de entretenimiento en el ámbito privado", en opinión de Manfred Gerdes, presidente de Sony en Alemania. Wii, por su parte, incorpora un control con apariencia de mando a distancia y sensores de movimientos, de forma que se puede convertir en espada, raqueta o palo de golf, dependiendo del juego que se practique. Nintendo espera de esta forma llegar al público temeroso de los complicados mecanismos de otras consolas, como las mujeres, según explicaba el responsable del marca en Alemania, Bernd Fakesch, y salir así de la eterna tercera posición en la guerra de las consolas.Hablamos de una competencia encarnizada, pues son muy pocos usuarios los que cuentan en casa con dos aparatos. Microsoft ha vendido ya cinco millones de unidades de su consola, cifra que espera duplicar de aquí a final de año. Y Sony, por su parte, apuesta por llegar a los seis millones hasta marzo, lo que equivale a 3.000 millones de dólares.Los casi cuatrocientos expositores procedentes de 25 países y repartidos por los 90.000 metros cuadrados de superficie que ocupa la feria siguen con atención la guerra entre competidores. La mayoría de ellos se dedica al diseño de juegos o a la fabricación de complementos y deben saber por qué consola apostar. Esta cita estival en Leipzig les proporciona la posibilidad de afinar su estrategia y de presentar novedades de cara al gran desafío navideño, época que engulle la mayor parte del negocio anual de los videojuegos. Para todos los públicosEn su quinto cumpleaños, la Games Convention es más grande y espectacular que nunca. Se espera que a ella acudan más de 150.000 personas. Gracias a este evento, la ciudad germano-oriental, convertida en los últimos años en capital europea del juego virtual y electrónico, permitirá ver hasta el domingo doscientos estrenos. Nuevas versiones de los juegos más exitosos, como Ages of Empire 3 o Devil May Cry 4, pero también premieres, como Spore, una simulación de la evolución de las especies.Y es que no todo es sangre y tiros. A la Games Convention acuden muchos expertos del sector a hacer negocios y visitantes que adoran los videojuegos, pero también público no especializado que siente curiosidad. Los organizadores lo saben y por eso no se dirigen sólo a los locos por las consolas. De hecho, incluso hay una nave dedicada a la familia que se esfuerza por desterrar la imagen de niños agresivos y pasados de peso con la que se suele relacionar a los chavales que juegan frecuentemente con videojuegos.Al margen de la música atronadora se habla allí de un nuevo instituto de estudios pedagógicos, en el que participan marcas líderes en el sector, y también de nuevos públicos. Por ejemplo, el de las niñas, y también el de los mayores de 50, que se aficionan cada vez más a los juegos de aeróbic mental que les permiten mantener joven su cerebro. Las chicas se han perfilado como un nuevo público objetivo. Sólo un 40 por ciento de ellas utiliza de forma regular un videojuego, cifra que contrasta con el 90 por ciento de chicos que sí lo hace. Para conseguir captar nuevas compradoras, los grandes fabricantes de consolas han pintado sus maquinitas de rosa. Quien se duerma en los laureles está perdido. Nuevos consumidores, soportes y el avance de los móviles y de Internet demuestran que el mundo del entretenimiento interactivo está en constante movimiento.