La instalación eólica dará suministro eléctrico a 820.000 hogares a partir de 2019Iberdrola y la compañía sueca Vantenfall han conseguido todas las autorizaciones para iniciar la construcción del complejo eólico marino de East Anglia One, que se convertirá en uno de los más grandes del mundo, con una potencia instalada de 1.200 megavatios (MW). El Gobierno británico ha concedido el permiso definitivo para poder ejecutar este proyecto. Se trata del proyecto más ambicioso acometido por Iberdrola en el ámbito de energías renovables. Y es que el complejo eólico marino de East Anglia One será capaz de atender el suministro eléctrico anual de alrededor de 820.000 hogares, implicará la inversión de 500 millones de libras (626 millones de euros) en el desarrollo económico del área donde se ubicará el parque y propiciará la creación de unos 2.700 empleos durante el periodo de construcción, 1.600 de ellos en la zona de East Anglia. Está previsto que las obras se inicien en 2017, los trabajos en alta mar en 2018 y que un año después ya se comience a generar energía eléctrica. En concreto, se instalarán un total de 240 aerogeneradores de última generación en un área de 300 kilómetros cuadrados. El parque también implicará la puesta en marcha de cinco subestaciones submarinas, que recogerán y distribuirán la energía de los citados aerogeneradores, cuatro grandes líneas submarinas de 73 kilómetros de longitud, que trasladarán la electricidad a tierra, y una nueva subestación cerca de la costa -adyacente a una ya existente y denominada Bramford-, cuya misión será conectar el parque con la red nacional. Iberdrola y Vattenfall han dedicado tres años a planificar los detalles de este complejo eólico marino, proceso que ha incluido una consulta realizada entre todos los colectivos interesados de la región. La eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán ha identificado la energía eólica marina como una de las bases de su crecimiento futuro y persigue liderar el desarrollo de esta tecnología, avanzando con la prudencia que exigen las inversiones de esta naturaleza. La empresa cuenta con una Dirección de Negocio Offshore, con oficinas en Glasgow, Londres, Berlín, Madrid y París, que impulsa la puesta en marcha de su cartera de proyectos, que ya suma unos 8.000 megavatios.