El lunes se puede concretar un recorte de las deducciones fiscalesLos casi 8 millones de partícipes que según Inverco tienen un plan de pensiones en España van a ver mermados los incentivos fiscales de este tipo de productos de aquí en adelante. Hasta ahora, las aportaciones realizadas a estos vehículos anualmente permitían reducir la base imponible del IRPF con unos límites: el 30 por ciento de la suma de los rendimientos netos del trabajo, hasta 10.000 euros; y en el caso de los mayores de 50 años, el 50 por ciento, hasta 12.500 euros. Pues bien, a partir de ahora, según la reforma fiscal que ha sido esbozada por el Gobierno, el nuevo límite podría reducirse a 5.000 euros, es decir, prácticamente la mitad -la cifra se concretará el lunes-. Además, en lugar de afectar sólo a los planes de pensiones, las aportaciones a depósitos y seguros de ahorro también incluirían esta posibilidad siempre que se mantengan, cómo mínimo, cinco años -ver información superior-. Esta medida podría suponer un varapalo para las aportaciones de los partícipes a planes de pensiones. De hecho, fuentes próximas al sector aseguran que "una reducción de hasta 8.000 euros no tendría muchos efectos, mientras que si la bajada fuera hasta 4.000 euros supondría un fuerte golpe para la industria". En cualquier caso, lo que sí hará esta reforma es restar aún más atractivo a este tipo de productos. En los que, precisamente, las elevadas comisiones y la falta de gestión activa en muchos casos convertían hasta ahora a la ventaja fiscal de la desgravación en uno de sus mayores reclamos. La rentabilidad media anualizada de los 584 planes de pensiones que se comercializan en España desde hace una década es del 2,77 por ciento. No obstante, casi la mitad de ellos no consigue cumplir con la que debería de ser la regla de oro de cualquier vehículo de inversión a largo plazo: batir a la inflación. Tan sólo un 48 por ciento de ellos lo consigue.