El proyecto, que une Huelva con el sur del país luso, se inaugurará la próxima semana como refuerzoRed Eléctrica está a punto de celebrar un nuevo hito. La compañía que preside José Folgado inaugurará el próximo día 30 de este mes la nueva interconexión eléctrica con Portugal y que ha supuesto una inversión total de 30 millones de euros. El objetivo de esta nueva instalación es reforzar el mallado de la red a la vez que se fortalecen las interconexiones con Portugal por la zona sur del país, con el fin de aumentar la capacidad de transporte y mejorar la calidad del suministro. La nueva línea transcurre a la altura de la comarca del Andévalo, en el norte de la provincia de Huelva y es uno de los principales proyectos de Red Eléctrica para 2014. La localización de esta nueva línea permite, además, mejorar la evacuación de las energías renovables de la Comarca del Andévalo, sobre todo, eólica, favoreciendo su integración en el sistema eléctrico peninsular. El proyecto se centra en la construcción y puesta en servicio de una subestación de 400 kilovoltios (Kv) en Puebla de Guzmán (Huelva) y 25 nuevos kilómetros de red de alta tensión desde la localidad onubense hasta la frontera lusa. Además, se pasará a 400 kv la actual línea de 220 kv que va desde la localidad sevillana de Guillena hasta Puebla de Guzmán, conectando de esta forma con la nueva línea de alta tensión de más de 300 kilómetros de longitud, que enlaza Guillena con Almaraz, en Cáceres, a lo largo de toda la Comunidad de Extremadura. Ambos países configuran en el terreno eléctrico un único mercado, el Mercado Ibérico de Electricidad (Mibel). Además de este nuevo enlace por Andalucía, la compañía también construye una nueva conexión por Galicia. Con ambos proyectos, se permitirá una capacidad de intercambio de 3.000 megavatios y fomentarán la integración eléctrica entre ambos países. Actualmente, entre España y Portugal, existen 7 líneas, que permiten alcanzar un máximo de capacidad de intercambio de entre 2.000 y 2.400 MW. Sin embargo, el Mercado Ibérico requiere, además, de un mayor nivel de interconexión eléctrica con el resto de Europa , ya que España continuará estando por debajo del 10 por ciento recomendado por la Unión Europea. El coste de la desunión es muy elevado, ya que tiene efectos negativos sobre la seguridad de suministro, la competitividad y la sostenibilidad.