Se trata de uno de los tramos de una 'súper alcantarilla' en la ciudadLa empresa de aguas del Támesis (Thames Water) ha llamado a las cuatro empresas que previamente había seleccionado, entre ellas un consorcio formado por Ferrovial y la firma inglesa Laing O'Rourke, para que preparen sus ofertas por el lote principal del proyecto Thames Tideway Tunnel, valorado entre 730 y 1150 millones de euros (600 y 950 millones de libras). Esta parte del proyecto, que vendrá a reformar de manera importante el sistema de alcantarillado de Londres, corresponde al tramo central de un túnel subterráneo de grandes dimensiones (25 kilómetros y más de siete metros de ancho) por donde se canalizarán todas las aguas residuales de la ciudad para poder ser tratadas y devueltas en condiciones al río. Además del consorcio de la española, también han sido habilitados para licitar en el proceso el grupo formado por Balfour Beatty, Bam Nuttall y Morgan Sindall; un equpo compuesto por Skanska, Bilfinger y Razel y una joint venture integrada por Vinci, Constain y Bachy. Según el calendario, este mismo mes de mayo se dará a conocer qué ofertas son aceptadas para pasar a la siguiente fase de licitación. Al margen de este tramo central, la empresa de aguas del Támesis también tiene en marcha la adjudicación de los dos tramos restantes del túnel, el correspondiente a la parte este, valorado en un máximo de 970 millones de euros (800 millones de libras), y el de la parte oeste, con un presupuesto tope de 610 millones (500 millones de libras). En total, el proyecto tendrá un coste máximo aproximado previsto en los pliegos del concurso de casi 5.000 millones de euros (4.100 millones de libras) teniendo en cuenta todas las actuaciones previstas. La parte correspondiente al túnel se estima en unos 2.600 millones (2.200 millones de libras). Tanto por el lado del concurso del lote oeste como del este también hay representación española. En el primer caso tanto Dragados, de ACS, como Ferrovial también figuran en consorcios distintos mientras que en el segundo se encuentro Hochtief, de ACS. Proyecto estratégico Esta infraestructura es clave para el futuro de la ciudad, ya que ayudará a limitar el vertido de aguas residuales en el Támesis, evitando así su contaminación. De hecho, las previsiones hablan de que el vertido de aguas insalubres al río pasará en diez años de 39 millones de toneladas al año a 70 millones de toneladas. La idea, según el plan, es que tanto las aguas fecales como la lluvia recogida por las alcantarillas fluya por este conducto hasta el túnel Lee (en construcción), rumbo a la planta de tratamiento de aguas Beckton, donde ya se han iniciado los trabajos para su ampliación. Finalmente, una vez tratadas las aguas serán devueltas al Támesis. Según las autoridades londinenses, las obras podrían dar comienzo a principios de 2015, mientras que la infraestructura estaría así lista para el ejercicio 2023. Las obras de este túnel, por otro lado, crearán cerca de 9.300 puestos de trabajo, de los que alrededor de 4.100 serán directos. Según las autoridades, cerca de 500 trabajadores ya han sido contratados para obras relacionadas con este proyecto.