El sustituto de Mulally también será consejero delegado a partir del 1 de julioSerá difícil hacer sombra a Alan Mulally en los fueros de Ford. El que fuera rey de la aeronaútica y pilar indispensable del fabricante automovilístico durante la decadencia de Detroit pasará el testigo a su protegido, Mark Fields, hasta ahora director de operaciones de la compañía. Dos directivos con un pasado y personalidades opuestas se preparan ya para una de las transiciones menos abruptas en la capital del motor en Estados Unidos. Con sede en Dearborn, en Michigan, Fields, de 53 años, tomará las riendas del único fabricante de coches estadounidenses que sobrevivió al azote de la crisis financiera de 2008 gracias al buen hacer de Mulally y sin necesidad de ser rescatado por los contribuyentes, véase General Motors, o absorbido por alguna compañía extranjear, como fue el caso de Chrysler por Fiat. Ford supo transformarse en plena tormenta y en estos momentos emplea a alrededor de 180.000 trabajadores y cuenta con cerca de 65 fábricas en todo el mundo. Perfil amable y accesible Desde que Mulally, quien anteriormente militó en las filas de Boeing, desembarcase en Ford allá por 2006, intentó transformar la cultura de la compañía a través de su tono amable y accesible. Un tono completamente opuesto al de Fields, neoyorquino de pro y con fuerte temperamento, que pronto se convirtió en el fiel aprendiz de Mulally, exaltando sus modelos de gestión y su pasión por el trabajo en equipo. Gracias a este aprendizaje, Fields se convierte en un líder apreciado por la familia Ford, el consejo de administración y curtido en el buen hacer demostrado por su predecesor."Nuestra prioridad en el futuro está en averiguar cómo acelerar el progreso, seguir centrándonos en la ejecución ... y mantener la cartera de productos", aseguró el próximo capitán de Ford en una sala llena de más de 400 empleados y periodistas en la sede de la compañía. "Es una historia de continuidad", añadió. Fields, un veterano de la compañía durante más de un cuarto de siglo, cuenta además con el voto de confianza de Wall Street. Al fin y al cabo, Mulally siempre ha contado con un cariño especial por parte de los inversores gracias a sus esfuerzos de reestructuración. Cuando comenzó a rumorearse que éste podría abandonar Ford para capitanear Microsoft, el mercado ya comenzó a digerir que la transición en Ford era un secreto a voces y que Fields era el favorito. Bill Ford, presidente del Consejo de Administración de Ford, dejó claro en un comunicado que "Mark ha transformado varias de nuestras operaciones en todo el mundo durante sus 25 años en Ford. Ahora, Mark está listo para dirigir nuestra compañía en el futuro como consejero delegado".