Separa la actividad de las pequeñas empresas y comercios de las más grandes y la integra en la red para particularesBBVA no quiere quedarse atrás en el aprovechamiento de las oportunidades que ofrecen ahora las pymes. La entidad ha puesto en marcha un proyecto para potenciar el negocio con las empresas y sacar el mayor rendimiento posible. La entidad va a llevar a cabo una reordenación de su área de banca de empresas, que será fragmentada. El plan consistirá en que las compañías con una facturación menor a cinco millones de euros pasarán a ser gestionadas directamente por la banca comercial, que atiende a los particulares. Es decir, segregará las micropymes, comercios y agricultores. El resto, las de mayor tamaño se mantendrán en esa división, que verá reducida su estructura, según fuentes sindicales. Por un lado, se reducirá el número de clientes de banca de empresas, de los 85.000 actuales a los 60.000. Por otro, el número de sucursales dedicadas para el segmento empresarial e industrial disminuirá casi una cuarta parte, de las 185 oficinas a 136. Y por último, 267 empleados se verán afectados por los cambios. En concreto, unos 84 se convertirán en gestores de microempresas y comercios en el área de banca comercial; 84 serán recolocados en otras divisiones; y 84 permanecerán en las operaciones de la red actual. Otras fuentes conocedoras del plan indican que con esta reordenación, el banco se adapta a la nueva realidad y "mejora la calidad del servicio" gracias a un aumento y especialización de la atención a las pymes a través de los gestores y la inmensa mayoría de las sucursales. BBVA, además, tiene previsto dar formación a unos 4.000 trabajadores de la entidad para operar de una manera más eficiente con las pymes y prepara nuevos productos. El proyecto de BBVA tiene por objeto apostar, como el resto del sector financiero, por el tejido industrial de nuestro país. La semana pasada, por ejemplo, el Santander anunció un plan integral para captar 61.000 pymes este año, sin incluir comercios y autónomos, con la disposición de 30.000 millones de crédito. La Caixa, por su parte, pretende incrementar en 200.000 el número de autónomos, comercios y microempresas. La iniciativa de BBVA se impulsará al margen de la campaña Yo soy empleo, la cual ayuda a las firmas que contratan trabajadores.