El juez del caso Nóos, José Castro, rechazó ayer imputar por blanqueo de capitales a Iñaki Urdangarin, como había solicitado el sindicato Manos Limpias, personado como acusación popular en la causa. De acuerdo con la postura planteada tanto por la Fiscalía como por los abogados de los principales imputados en el caso, Castro desestima imputar al exsocio del duque de Palma en el Instituto Nóos, Diego Torres, y a su esposa, Ana María Tejeiro. El magistrado argumenta que la reforma legal de 2010 que "amplía las posibilidades del tipo penal a la conducta del llamado autoblanqueo" no podría aplicarse a los máximos responsables de Nóos porque supondría una imputación retroactiva. En el mismo auto, el juez instructor vuelve a citar a declarar por escrito, en calidad de testigo, al expresidente de la Comunidad Valenciana Francisco Camps, aunque no concreta la fecha para ello. Camps, en un despacho oficial, sin comunicación y en presencia de la secretaria del juzgado de instrucción, tendrá que responder a nuevas preguntas planteadas por las partes a partir de su declaración del 1 de febrero, centradas en su conocimiento de los contratos con Nóos.