Madrid. Los políticos han decidido enterrar, por ahora, la tan ansiada fusión de las cajas vascas, BBK, Kutxa y Caja Vital. Así se desprende del sorprendente anuncio realizado ayer por el secretario general del PSE, Patxi López, quien aseguró que la integración está "aparcada" y que no es el mejor momento para llevarla a cabo, según anunció en el Forum Europa. El responsable del PSOE en Euskadi defendió que no se podrá llevar a cabo "hasta que no se garantice una seguridad, una estabilidad y una tranquilidad", en referencia al movimiento de rechazo a la fusión surgido en Álava. Sin pelos en la lengua, López se refirió a que también debe existir un "clima político favorable", algo que, en su opinión, no existe "en este momento" en el País Vasco. La principal fricción entre el Gobierno de Zapatero y el Gobierno vasco es el rechazo del plan soberanista de Juan José Ibarretxe, que sigue adelante con su proyecto. "Cualquier entendimiento de las cajas pasa no sólo porque haya un equilibrio territorial entre ellas, sino también por tener un equilibrio político que represente la pluralidad de la sociedad vasca", argumentó, informa la agencia Ep. Asimismo, aseguró que no se cierra "a nada", sino que cree que se tiene que colaborar.