El beneficio de la compañía eléctrica cae un 8% por la reforma energéticaEndesa se mostró ayer muy crítica con la reforma energética y el nuevo precio de la luz para los consumidores domésticos del mercado regulado. En opinión del consejero delegado de la compañía, Andrea Brentan, el nuevo procedimiento no podrá estar en marcha en su totalidad hasta el 2015, a pesar de que el Ministerio de Industria ha ordenado que esté en funcionamiento el próximo mes de abril. "Los patrones de consumo no pueden adaptarse a los de mercado", explicó Brentan en referencia al nuevo método propuesto por el Gobierno para tener como referencia la evolución del pool, que es un mercado eléctrico en tiempo real. El directivo auguró que el nuevo sistema puede generar alarma social y que habrá un aluvión de reclamaciones por parte de los usuarios. La facturación se hará por medias diarias para perfiles de consumidores o por horas para quienes tengan contadores inteligentes. "Hay que adaptar en muy poco tiempo todos los sistemas", lamentó en una conferencia ante analistas con motivo de la presentación de resultados. Los cambios regulatorios en España no han dejado indemne a la eléctrica. La compañía ya ha tenido que digerir 1.300 millones de euros en 2013 por los recortes aprobados por el departamento que dirige José Manuel Soria. Además, a partir de este ejercicio el impacto recurrente anual ascenderá a 1.700 millones. Brentan coincidió con el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, a la hora de denunciar que la generación en España pierde dinero, "salvo la hidráulica", especificó. Así, la reforma energética ha lastrado el negocio del grupo en España, donde el beneficio neto cayó un 17 por ciento, hasta los 1.176 millones de euros, y el resultado bruto de explotación (Ebitda) descendió un 14 por ciento, hasta los 3.277 millones. Por contra, Latinoamérica ha sido el vector de crecimiento, gracias al crecimiento de la demanda de distribución de Brasil y Chile y al reconocimiento de la deuda tarifaria histórica en Argentina. Así, el beneficio neto en este área de negocio creció un 28 por ciento, hasta los 1.767 millones de euros. No obstante, la bonanza de Latinoamérica no fue suficiente para compensar el golpe en España y el resultado global se resintió un 8 por ciento hasta los 1.879 millones. La consecuencia inmediata es una reducción de las inversiones en España para limitarse sólo a lo estrictamente obligado en la Ley para el mantenimiento de las redes. El grupo ya redujo su esfuerzo inversor un 33 por ciento en 2013 y prepara recortes adicionales, aunque mantendrá la seguridad y los niveles de calidad de sus redes.