Las entidades, que aplicarán una quita del 60%, ya buscan un socio industrialLa banca acreedora se prepara ya para tomar el control de Pescanova. Las entidades que integran el pool negociador -Sabadell, Popular, Bankia, NGC, Caixabank, Santander, BBVA y la italiana UBI Banca- han alcanzado ya un principio de acuerdo para presentar una propuesta de convenio al juez. El pacto alcanzado implica una quita del 60 por ciento de la deuda y la capitalización del resto, lo que le convertiría a los bancos hacerse con el 90 por ciento del capital de la pesquera. Eso al margen de realizar una inyección de capital de 200 millones de euros para garantizar la supervivencia del grupo. Fuentes próximas a las entidades financieras han confirmado que la propuesta suma ya el apoyo de la mitad de los acreedores, pero insisten, no obstante, en que hay también grupos extranjeros que podrían sumarse. Es el caso, por ejemplo, de HSBC, Rabobank, Deutsche Bank y Commerzabank. Eso al margen de que sigue abierta la puerta a la posible incorporación de un socio industrial, para lo que se está contando con el asesoramiento de KPMG y el bufete de abogados Freshfields. En Pescanova, sin embargo, no se fían y parecen convencidos de que esta es la peor salida posible. Según han asegurado a elEconomista fuentes próximas al consejo de administración, "si no hay un socio industrial, lo más probable es que Pescanova acabe liquidándose porque la banca querrá hacer caja pronto y vender por partes". Junto a la propuesta de la banca, figuraban, en principio, otras dos más. Una, la aprobada por el consejo, la integran Damm y los fondos de inversión Luxempart, KKR y Ergon Capital Partners. Su idea, que pasa por una quita del 80 por ciento, aunque ofreciendo a la banca capitalizar deuda para quedarse un 10 por ciento del capital, ha sido rechazada ya de forma tajante por los acreedores. Al igual que ha ocurrido también con la otra oferta que hay sobre la mesa, la de los fondos Centerbridge y Blue Crest. El plazo límite para la presentación de las propuestas terminará el 28 de febrero, aunque se admitirán los escritos hasta las tres de la tarde del 3 de marzo. Posteriormente, la fecha tope para presentar adhesiones o votos en contra a las propuestas de convenio será el 31 de marzo. Pescanova, que se encuentra en situación de concurso de acreedores, suma una deuda de 4.200 millones de euros, incluyendo los bonos. Su expresidente, Manuel Fernández de Sousa, está además imputado por una presunta estafa en la Audiencia Nacional, al igual que gran parte de la cúpula directiva. Todo después de ocultar deuda y declarar ventas ficticias para lograr financiación.