La canadiense, principal acreedora de la inmobiliaria, dispuesta a lanzar una opaEl fondo canadiense Brookfield, principal acreedor de Colonial, está decidido a impedir la ampliación de capital con la que Villar Mir tomaría el control de la inmobiliaria, al convertirse en accionista mayoritario. Para ello el gestor de fondos de inversión ha plantado cara al empresario español con una contraoferta en la que propone una reestructuración de la deuda del grupo, que alcanza los 2.100 millones de euros, de los que 1.800 millones vencen en diciembre de este año para "posteriormente recapitalizar el balance de Colonial". Según el documento remitido ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Brookfield promovería la reestructuración del préstamo en cuatro tramos, a través de un proceso íntegramente consensuado con todos los prestamistas (ver gráfico). En caso de que no fuera posible alcanzar dicho consenso, el fondo formularía un plan de restructuración de deuda, como prevé la legislación del Reino Unido, para el cual, la compañía asegura tener un apoyo suficiente de aproximadamente el 77 por ciento de los acreedores. En una segunda fase, Brookfield acometería la recapitalización de Colonial mediante la amortización del préstamo. Para ello el fondo propone vender la totalidad de la participación que Colonial tiene en la inmobiliaria francesa SFL, de la que además ha recibido una oferta de compra, según aparece en el mismo documento. Seguidamente la canadiense acometería una ampliación de capital a un precio de entre 0,25 y €0,50 euros para adquirir una participación significativa en el accionariado de la inmobiliaria. En este sentido, el fondo asegura que está dispuesta y tiene el suficiente capital para lanzar una opa sobre Colonial, en caso de que fuera necesario. Estos son los detalles de la propuesta de Brookfield, que se presentará formalmente en la junta extraordinaria del próximo martes, y en la que se decidirá quién tomará el timón de Colonial.