La consolidación mundial de las telecomunicaciones abrió ayer un nuevo capítulo después de que las autoridades brasileñas de competencia (Cade) aprobaran sin restricciones la fusión del grupo brasileño Oi y la multinacional lusa Portugal Telecom. Portugal Telecom (PT) cerró en octubre del pasado año un acuerdo para fusionarse con la brasileña Oi, de la que es accionista de referencia con una participación próxima al 23 por ciento. La firma lusa indicó en su momento que la fusión es la culminación "natural" de la alianza establecida en 2010 entre Portugal Telecom y Oi. Este acuerdo dará origen a un operador de telecomunicaciones líder cuyas operaciones cubrirán a unos 260 millones de personas y cerca de 100 millones de suscriptores, de acuerdo con los datos de la compañía. Las compañías, que ya tienen el visto bueno del regulador brasileño, esperan cerrar la transacción en el primer semestre de 2014. Portugal Telecom es el principal operador luso, mientras que Oi es la cuarta compañía de telefonía móvil de Brasil.