Lanzará de aquí a 2009 hasta 12 modelos nuevos para frenar la caída en su segundo mercado más importanteShanghai. Volkswagen lanzó ayer en China su nuevo modelo Sagitar con el propósito de frenar su caída libre en su segundo mercado en importancia después de Alemania. El Sagitar, una variante del VW Jetta que se vende ya en el país asiático a 22.000 dólares, es el primero de una hornada de 12 modelos que el fabricante alemán quiere introducir en el mercado chino antes de 2009. Con ello, Volkswagen pretende revitalizar las ventas en un país que ha liderado las ventas durante 21 años pero que, en 2005, supuso 119 millones de euros en pérdidas.Volkswagen, que tiene como socios chinos a Shanghai Automobile Industrial Corporation (SAIC) y a FAW Group, confía en retornar a los números azules este mismo año con las ventas del Sagitar y con el plan de reducción de costes que puso en marcha el año pasado.En el primer trimestre de 2006 el grupo ha vendido 164.339 vehículos, incrementando un 40 por ciento sus ventas en relación al mismo periodo del año pasado, cuando se desplomaron un 60 por ciento en comparación con el primer trimestre de 2004. "Lo haremos mejor este año en términos de volumen y, en términos financieros, tendremos beneficios", asguró Weiming Sohen, presidente ejecutivo de marketing y ventas de VW en el país comunista. Sin embargo, el aumento de las ventas viene espoleado por los descuentos aplicados a tres modelos. Pese a que en 2005 las ventas experimentaron una notable mejoría, todos los fabricantes vieron seriamente mermados sus ingresos al reducirse los márgenes. VW, que llegó a tener una cuota de mercado en China por encima del 50 por ciento durante la década de los 90, suspendió la inversión prevista para una planta nueva y puso en marcha el plan de reducción de costes.