Castillejo, que ha declarado el concurso de acreedores de su patrimonial, tiene pignorado el 64,71% que posee de Zinkia Pocoyó caerá en manos de la banca por la insolvencia de su presidente y primer accionista, José María Castillejo. El primer espada de Zinkia ha declarado el concurso de acreedores de Jomaca 98, la patrimonial a través de la que posee el 64,71 por ciento de la productora del programa infantil, una participación que tiene totalmente pignorada a favor de las entidades financieras. Según alerta el pliego de la emisión de obligaciones simples remitido por la dueña de Pocoyó a la CNMV, Jomaca 98 "tiene pignorada la totalidad de las acciones de Zinkia por lo que un posible impago de préstamos podría quitar a Castillejo el control de la compañía". No es la primera vez que el presidente de Zinkia pone en prenda sus acciones en la productora para conseguir un crédito. En marzo de 2011 anunció que había pignorado el 22,45 por ciento de sus acciones para avalar un préstamos de 2,5 millones de euros que vence en febrero de 2014. En principio, y debido a los problemas financieras que atraviesa Zinkia, que a junio de 2013 no tenía liquidez suficiente para atender sus deudas y declaró el preconcurso de acreedores en octubre, puede que Jomaca tenga que entregar dicho paquete accionarial al prestamista privado. La patrimonial de Castillejo, socio fundador de Zinkia, tampoco está pasando por un buen momento. Jomaca 98 cerró 2012 con unas pérdidas de 762.192 euros, casi el doble que los números rojos de 463.482 euros que registró en 2011. En cuanto a los ingresos, la facturación de la sociedad inversora cayó un 65,5 por ciento en 2012 con respecto al año pasado. A su vez, y según recoge el BORME, la seguridad social ha reclamado a la patrimonial de Castillejo 37.812 euros por impago de cuotas entre 2008 y 2012, aunque el grueso de las ejecuciones concentra a lo largo del año pasado. Así, los problemas se acumulan para Pocoyó. Además de los problemas de liquidez y los malos resultados (a junio de 2013 perdió 850.156 euros frente a los beneficios de 2,18 registrados en el mismo periodo del año pasado), el 19 de noviembre, la compañía reconoció que no podría alcanzar las cifras previstas para el presupuesto de este año, y señaló que continuaba sus negociaciones" con los acreedores para procurar la refinanciación de su deuda, que rondaría los 10 millones de euros.