Buenos aires. En escasos cinco días, el presidente Néstor Kirchner ha resuelto a favor de las reclamaciones de Aerolíneas Argentinas, tras recibir a su cúpula el pasado día 4. Y lo ha hecho con una batería de medidas. Primera: subirá un 20 por ciento las tarifas. Segunda: subsidiará el precio del combustible con una exención de impuestos. Tercera: compensará los costes de sus rutas no rentables. Y cuarto: aprueba el balance de 2005, tras negarse a hacerlo con los de 2002-03 y 2004, impidiendo así la salida a Bolsa. En la misma reunión se acordó hacer accionista al Estado, sin definir su participación (del 5% al 20%).