Fitch ha elevado de negativa a estable la perspectiva de los rating de Red Eléctrica de España (REE) y Enagás, con lo que adapta su valoración al bono soberano español, que recientemente fue objeto de una decisión similar por parte de la agencia de calificación crediticia. En sendas notas, la agencia mantiene en A- (tercera nota dentro de la calidad buena) las calificaciones de REE y Enagás, al tiempo que explica los criterios por los que vincula la calidad crediticia de los gestores técnicos al rating de España. Según Ep, estas dos empresas, que generan la mayor parte de su actividad a nivel doméstico y que carecen de diversificación geográfica internacional, no pueden tener un rating dos escalones superior al país de origen, explica la agencia. Tanto REE como Enagás desarrollan negocios de escaso riesgo y tienen escasa exposición a las volatilidades de precios, gracias al perfil regulado de su actividad. Si el primero es un monopolio natural en el tranporte de electricidad, el segundo lo es en el de gas.