Cada vez es más difícil que un inversor externo se haga hueco en el negocio financieroYa no queda casi nada que comprar o integrar, pero el apetito de los grupos bancarios internacionales por la Europa del Este no se sacia. En este momento, siete líderes de la banca controlan dos tercios del mercado. En la actualidad es casi imposible que un inversor externo entre desde cero en el mercado de la Nueva Europa, donde ya no quedan bancos que rastrear. No hay que olvidar que el sistema bancario de la eurozona está en vías de transformación, lo que puede tener gran impacto en la situación bancaria del Este, donde sólo tres bancos pertenecen a los primeros 20 grupos europeos.Nuevas vías de desarrolloEn la práctica, los planes de reorganización de los grandes grupos internacionales presentes en la región pueden abrir nuevas vías de crecimiento. Según un estudio de la empresa de investigación New Europe de UniCredit, la mayor concentración de bancos extranjeros se encuentra en Estonia (99 por ciento), Eslovaquia (98 por ciento) y Croacia (91 por ciento). Y la más baja en Turquía (19 por ciento) y en Rusia (9 por ciento). Según los investigadores de UniCredit, el sector bancario de la Europa Central y del Este seguirá mostrando un profundo dinamismo. El aumento del nivel de vida, el aumento del ahorro familiar y la carga impositiva no demasiado elevada refuerzan este escenario y la posibilidad de ofrecer nuevos productos bancarios. Será sobre todo el mercado minorista el que dirija el desarrollo del sistema bancario de la zona, con un crecimiento medio anual estimado del 31 por ciento en el período 2005-2008.El crecimiento más significativo está previsto en Rusia, donde el sector minorista debería crecer un 56 por ciento anual. Tras Rusia, los siguientes mercados más dinámicos son Rumania, Serbia y Turquía, donde se prevé un crecimiento medio anual alrededor del 30 por ciento.En Rusia y Serbia ya se ha fijado el grupo húngaro Otp, que ha iniciado en ellos una estrategia de adquisiciones. Hacia Serbia también ha dirigido su atención San Paolo IMI, que compró el 87 por ciento del Panonska Bank. Además, todos los grupos bancarios están poniendo sus ojos en Ucrania, aunque el marco político de Kiev inspire todavía poca seguridad.