En diciembre de 2014 termina el contrato actual de uso de la marca que ha reportado grandes beneficios a EuskadiEl lehendakari Iñigo Urkullu y el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao mantendrán la semana que viene, el viernes 11 de octubre, la primera reunión formal con los responsables de la Fundación Fundación Solomon Guggenheim, con la intención de para manifestar su interés en la renovación del convenio con el organismo para los próximos lustros. La reunión se producirá dentro del viaje oficial que el lehendakari Urkullu realizará a Estados Unidos, a las ciudades de Nueva York, Washington y Milwaukee, donde se reunirá con agentes políticos, económicos y culturales. Las autoridades vascas están muy interesadas en renovar el acuerdo para la licencia del uso de marca, ya que el actual expira en diciembre de 2014. El canon que se abonó para la licencia inicial rondó los 12 millones de euros a principios de los años noventa. Además de la contraprestación económica que se habrá de negociar, las autoridades vascas quieren presentar a la Fundación un proyecto de renovación con una "ampliación discontinua" del eficio, un apéndice del museo fuera de Bilbao, en la comarca de Urdaibai donde unir la experiencia de arte y naturaleza. Altísima rentabilidad La Diputación Foral de Bizkaia sostiene que el impacto económico generado por el Guggenheim ha sido 37 veces superior a su coste. La institución foral cifra el coste de la construcción en 84 millones, pero ha desencadenado un gasto directo en Euskadi de 3.173 millones y unos ingresos fiscales de 457 millones. Sin embargo, el gasto público para poner en marcha la pinacoteca fue mayor, según el Tribunal vasco de Cuentas Públicas (TVCP). Así la edificación costó 86,47 millones y el resto de costes hasta su inauguración elevó la cifra hasta los 166,51 millones. Si a esto se le suma los cerca de 110 millones en compra de obras de arte, la cifra final asciende a 276,51 millones. A pesar de esta disparidad de cifras, el saldo sigue siendo muy positivo, ya que habría revertido más de 3.000 millones de actividad económica para Euskadi y otorgado a la ciudad de Bilbao renombre internacional. Finlandia vuelve a sonar A pesar de que en 2012 Helsinki rechazó acoger un museo de la marca americana por el alto coste que implicaba, la Fundación Salomón Guggenheim quiere retomar el proyecto rebajando su coste y incorporando a inversores privados en la promoción del proyecto. La pinacoteca vasca se posicionó a favor del proyecto de Helsinki en 2012, al no considerarlo competencia, posición que ahora mantendrá.