La economía crecerá el 0,7 por ciento y se prevé un repunte del consumo privado y la inversiónLa reducción del paro vendrá impulsada por el trabajo a tiempo parcial y la caída en los activosLos Presupuestos de la recuperación. Así definía ayer la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, el proyecto de las cuentas del Gobierno para el año próximo, que aprobó ayer el Consejo de Ministros para su remisión el lunes al Congreso de los Diputados. Unos Presupuestos que, en palabras del titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, son "austeros, rigurosos y comprometidos con la reducción del déficit", y en los que no habrá nuevas subidas de impuestos. Y una recuperación que el ministro de Economía, Luis de Guindos, reconocía que "será débil, pero que está ahí", y que hará posible la creación de empleo neto, mínima y precaria, eso sí, a partir del segundo semestre de 2014. Con todo, el Presupuesto de 2014 contempla un alza del techo de gasto no financiero del 2,7 por ciento, hasta los 133.259 millones, y una subida del 21,5 por ciento del gasto en becas; del 17,1 por ciento en cultura; del 4,8 por ciento en vivienda de cara a la rehabilitación; así como del 1,3 por ciento en I+D+i. Además, el equipo económico destacó el viernes en rueda de prensa que la partida para el desempleo seguirá al alza y el volumen de las pensiones crecerá un 4 por ciento, en el marco de unas Cuentas con marcado carácter social, indicó Montoro. Apela a la prudencia "Todos los indicadores llevan ya meses avanzando una recuperación moderada", apuntó Guindos , quien insistió en que la recesión "ha finalizado ya en el primer semestre de este año y en este segundo semestre creceremos ya a tasas ligeramente positivas" para entrar en crecimientos sostenidos en 2014. A pesar de todo, el titular de Economía matizó que las previsiones macroeconómicas que acompañan a los Presupuestos son "prudentes y conservadoras", dejando entrever que posiblemente se quedarán cortas en las expectativas de mejora. De acuerdo con el escenario previsto por el Ejecutivo, el PIB crecerá un 0,7 por ciento el año que viene, dos décimas por encima de las previsiones del Programa de Estabilidad avanzadas en abril. Por su parte, la tasa de paro se reducirá al 25,9 por ciento de la población activa, tras cerrar el ejercicio en curso en el 26,6 por ciento, cinco décimas mejor que el 27,1 por ciento previsto. Una reducción de la tasa de paro que Guindos admitió está también influida por una caída moderada de la población activa. El motor exterior En este punto, Guindos tuvo que matizar que la anunciada creación de empleo neto en 2013 será de sólo el 0,1 por ciento y en términos de Encuesta de Población Activa, "que es la importante" y que contabiliza tanto los puestos de trabajo creados tanto a tiempo completo como a tiempo parcial. Mientras que en términos de contabilidad nacional, que recoge sólo el empleo a tiempo completo, se producirá todavía un descenso del -0,2 por ciento. La mejoría vendrá impulsada fundamentalmente por el sector exterior, que aportará 1,2 puntos al PIB, cinco décimas menos que este año, pero también la inversión y el consumo privado volverán a tasas positivas, con avances del 0,2 por ciento en ambos casos, aunque la demanda nacional seguirá restando 0,4 puntos al PIB, como consecuencia de la evolución negativa de la construcción y del descenso en casi tres puntos del consumo público. Las exportaciones mantendrán su dinamismo con una subida del 5,5 por ciento y se prevé una reactivación de las importaciones que podían aumentar el 2,4 por ciento. Para Guindos, las ganancias de competitividad logradas con la reforma laboral y la liberalización de mercados y servicios "han producido un cambio estructural que se mantendrá a futuro como una de las fortalezas de la economía española". Esta mejora de la posición frente al exterior permitirá obtener un histórico superávit del 2,3 por ciento del PIB este año y aún superior, del 3,4 por ciento el que viene. Guindos resaltó también que se reducirá el endeudamiento neto con el exterior en más de 50.000 millones, algo que estima "fundamental". Importante también es para el equipo económico del Gobierno el control de la inflación, que va a permitir acabar este año con un IPC "en torno al 1 por ciento, sino claramente por debajo. Asimismo, Montoro destacó el esfuerzo de la sociedad española en los ajustes, con mención especial al colectivo de los funcionarios. Desde el punto de vista de los objetivos, Santamaría indicó que el Gobierno ha intentado conseguir el "equilibrio entre la contención del gasto y medidas para la recuperación y el bienestar social". Se trata, dijo, de unos Presupuestos "responsables y realistas" que combinan la austeridad con el impulso a la recuperación económica".