El banco asiático, uno de los más saneados, rechazó la entrada del belga Fortis shangai. BBVA busca novia formal en China. Según ha podido saber elEconomista a través de distintas fuentes, el banco español tiene en su punto de mira a dos bancos chinos y ya ha establecido los primeros contactos. De fructificar estas negociaciones el banco español se sumaría a la carrera emprendida desde hace meses por los principales bancos mundiales para hacerse con paquetes accionariales en bancos del país asiático. La entidad que preside Francisco González habría mantenido contactos con el China Minsheng Banking Corporation, una de las entidades financieras más saneadas de la República Popular y único banco cuyo accionariado está bajo control privado. BBVA se encuentra a la espera de que las autoridades chinas aprueben la licencia para abrir sucursal, que sería la primera otorgada a un banco español en China.Ricardo Aclan, responsable del desarrollo del negocio minorista para Asia, se limitó a comentar, en relación al interés de BBVA en el Minsheng, que la política de adquisiciones llevada a cabo por los grandes bancos en China "puede ser la estrategia buena". Otras fuentes del banco español tampoco desmintieron los contactos con el Minsheng al ser consultados por este periódico. Además, en un reciente acto celebrado en el país comunista, un directivo de BBVA aseguró ante un grupo de empresarios que el banco pretendía apostar en China por la banca minorista, escenario que implicaría obligatoriamente el apoyo en una entidad bancaria local con toda su red de distribución. "Nos fijamos en algún banco de la segunda línea", dijo.El más atractivoEl Minsheng es para los inversores extranjeros uno de los más atractivos de los que siguen abiertos a la participación foránea. Según la ley china, sólo un máximo del 25 por ciento del capital de un banco local puede estar en manos extranjeras. Ese porcentaje ha sido ya prácticamente copado en la mayoría de bancos chinos con potencial, tras un desembolso extranjero de unos 13.800 millones de euros.El Minsheng Banking se ha desprendido ya del 4,55 por ciento de sus acciones en favor de Temasek Holdings, un fondo de inversiones del Gobierno de Singapur, y del 1,22 por ciento que compró International Finance Corporation, perteneciente al Banco Mundial. Así que alrededor de un 19 por ciento está, supuestamente, a tiro del mejor postor. Según datos propios, el Minsheng posee activos valorados en 50.800 millones de euros y depósitos por valor 40.650 millones. Además, el porcentaje de préstamos fallidos no sobrepasa el 2 por ciento, toda una referencia en un país donde la morosidad media en el sector bancario se sitúa oficialmente en torno al 9 por ciento (aunque las agencias de rating internacionales creen que es mucho mayor). Sabedor de que quedan pocas opciones solventes en el mercado, el Minsheng se deja querer y deshoja la margarita acerca de quiénes serán sus socios estratégicos del futuro justo antes de salir a bolsa en Hong Kong, previsiblemente este mismo año. Incluso, su acción se ha revalorizado significativamente en el primer trimestre del año.Aunque son varios los pretendientes que tiene ya el banco pekinés, Temasek parece el mejor colocado para aumentar su presencia en el accionariado. "Estamos en conversaciones para que Temasek aumente su participación y es probable que el Consejo lo apruebe. Tenemos muy buena cooperación con ellos", explicó el pasado mes Dong Wenbiao, su presidente. También Société Générale pretende lanzar sus garras sobre el Minsheng, después de dos intentos fallidos para adquirir participaciones en el Huaxia Bank y en el Guangdong Development Bank. El banco francés mantiene abiertas las negociaciones para comprar entre un 5 y un 10 por ciento del capital. El tercer pujador en liza, además de BBVA, es el Nacional Australia Bank. Y esta misma semana se ha sabido que la junta directiva del Minsheng ha rechazado una oferta del banco belga Fortis Bank.El segundo banco que entra en todas las quinielas para futuras adquisiciones foráneas, incluido por parte del propio BBVA, es el China Merchants Bank, el sexto banco comercial de China por activos. Esta entidad se adelantó a sus rivales y fue el primero en ofrecer a sus clientes tarjetas de crédito y débito y otros productos tecnológicos; a finales de 2005 había emitido cinco millones de tarjetas de crédito. Con todo, su presidente Qin Xiao aseguró en su día que su grupo no tenía intención de vender participaciones a bancos foráneos: "no necesitamos ni su capital ni su marca", dijo rotundamente. Sin embargo, el banco Mitsubishi, el más grande de Japón, ha manifestado su intención de invertir entre 200 y 300 millones de dólares en el Merchants en 2006. También mantienen contactos con UBS.