Escala al puesto once del 'ranking' mundial de productores de vehículos superando a Rusia, según los datos de la OICAEl sector del automóvil recupera músculo. España ha fabricado 1,1 millones de vehículos en el primer semestre del año lo que le ha llevado a escalar un puesto en el ranking mundial de productores de vehículos. Según los últimos datos publicados por la Organización Internacional de Constructores de Automóviles (OICA), España ocupa el puesto número once tras sobrepasar a Rusia y ya pisa los talones a Canadá que fabricó casi 1,2 millones de coches. En el primer semestre de 2012 fabricó menos un millones de automóviles. Pese al incremento de la producción en las fábricas nacionales, Europa ha perdido fuelle como constructor y apenas han salido de sus centros el 19 por ciento de los vehículos frente al 20 por ciento del primer semestre de 2012. Esto se debe a que algunas marcas como Renault, Nissan, Ford han incrementado el número de modelos en las fábricas españolas y algunas marcas incluso prevén cerrar sus centros europeos en favor de nuestro país. La diversificación de la exportación española hacia nuevos destinos como el norte de África, EEUU o Turquía (actualmente las plantas españolas exportan el 90 por ciento de los vehículos que fabrican), intensifica los ritmos de producción en las factorías nacionales, que en el primer semestre del año crecían un 6 por ciento. Las previsiones de producción para este año indican un volumen próximo a los 2,2 millones de vehículos frente a los 2 millones de vehículos fabricados el año anterior. En esta línea, el ministro de Industria, José Manuel Soria, anunció en agosto que tres multinacionales del motor estaban negociando con las plantas españolas trasladar sus centros la fabricación de nuevos modelos lo que podría suponer una inversión adicional de unos 1.000 millones de euros. De llegar a buen puerto estas conversaciones se daría un gran impulso al plan 3 millones impulsado por Anfac. "Para continuar con la línea iniciada de reindustrialización, necesitamos una estructura de producción bien engrasada, incentivos fiscales, mercado de trabajo flexible, avances en tecnología y expectativas de recuperación de la demanda interna e internacional. Es necesario tanto converger en competitividad, como la necesidad imperiosa de atraer capital productivo para volver a crecer de forma sostenida", aseguró Mario Armero, vicepresidente ejecutivo de Anfac. No en vano, tras el incremento de la producción de vehículos en España están los sucesivos planes tipo Pive, la reforma laboral, las renegociaciones de horarios, productividad y costes en las empresas.