La compañía introduce por primera un 'smartphone' barato con carcasa de plásticoFiel a la tradición, Apple ha dejado que se amontonen los rumores sobre el lanzamiento, el próximo septiembre, del último iPhone. La gran novedad, más allá de las innovaciones tecnológicas con que siempre sorprende la compañía de Cupertino, es que esta vez las manos de Tim Cook, el jefe ejecutivo, estarán ocupadas con dos nuevos modelos de teléfonos inteligentes en lugar de uno: el iPhone 5S y el iPhone 5C. Apple ataca con más armas de las habituales para hacer frente a la creciente competencia de Samsung, Sony, HTC y Google. El iPhone 5S sería una versión actualizada del modelo más sofisticado actualmente en el mercado mientras que el iPhone 5C sería el más barato de la familia y con menos funciones, según The Wall Street Journal. Además de las típicas carcasas en blanco y negro, los usuarios podrán elegir una versión dorada, entre otros colores. Hon Hai Precision Industry (conocida popularmente como Foxxcom) tiene sus cadenas de producción en China y Taiwan a pleno rendimiento para que los primeros aparatos estén disponibles en las tiendas estadounidenses a partir del día 10 del próximo mes . Con el lanzamiento de un teléfono inteligente barato, Apple introduce un importante cambio en su estrategia para captar nuevos consumidores. Desde la salida del primer iPhone, quien quería pagar menos por un producto de la marca tenía que acudir siempre a los modelos más antiguos. El iPhone 5C, construido con una carcasa de plástico, busca meter baza en los mercados emergentes donde las firmas asiáticas lideran las ventas de móviles inteligentes por un amplio margen. La decisión de Apple se produce cuando el jefe de su principal rival, Samsung, estaría a punto de presentar nuevos teléfonos inteligentes y otros dispositivos, entre ellos un reloj inteligente. Los analistas han venido especulando con la idea de que a Apple no le queda más remedio que cambiar su estrategia para mantener su liderazgo. Contar con modelos de menos precio y atraer a más consumidores, especialmente en países emergentes, era una asignatura pendiente que el equipo de Tim Cook no podía demorar más. El pasado año, Apple logró unos excelentes resultados cuando sus envíos ventas de smartphones aumentaron más de un 50 por ciento. A lo largo de 2013, sin embargo, la compañía ha sufrido para mantener ese ritmo. Por esta razón, los analistas consideran que un iPhone de bajo coste impulsaría las ventas de Apple, por lo que se muestran optimistas ante el anuncio del ya bautizado iPhone 5C. Una encuesta publicada por la consultora Gartner la semana pasada afirmó que el segmento de mercado de Apple en todo el mundo cayó al 14,2 por ciento en el segundo trimestre, mientras que la cuota de mercado de Samsung aumentó al 31,7 por ciento.