Era cuestión de días. Después de que el pasado miércoles Philip Morris encareciera 10 céntimos el precio de sus principales marcas -Marlboro, Chesterfield y L&M, entre otras- Altadis responderá, probablemente, hoy con una subida similar en sus enseñas. Una vez comunicada la decisión al Comisionado del Mercado de Tabacos, y en cuanto aparezca la resolución publicada en el BOE, las cajetillas de Fortuna y Nobel pasarán a costar 4,35 euros, desde los 4,25 actuales, mientras que la de Ducados elevará su precio de 4,35 a 4,45 euros. La decisión de las dos compañías se produce después de que el Gobierno aprobara el pasado viernes una modificación de los impuestos del tabaco. En concreto, en el caso de los cigarrillos, se elevó el tipo específico de 19,1 a 24,1 euros por cada mil unidades y se redujo el ad valorem o porcentual del 53,1 al 51 por ciento. Asimismo, el impuesto mínimo pasó de 123,97 euros a 128,65 por cada mil cigarrillos. Altadis ya incrementó el pasado martes una media del 11,9 por ciento el precio de sus marcas de picadura de liar y un 6,6 por ciento las enseñas de cigarritos mecanizados. Los nuevos precios implicaron una subida de 1,35 euros en la picadura de Ducados Rubio, cuyo envase de 70 gramos pasó a costar 11,55 euros, desde los 10,20 euros actuales. Nuevas subidas Otra tabaquera, Japan Tobacco International (JTI), subió también ayer de forma generalizada el precio de las gamas de picaduras de liar Winston y Camel, y se espera que en los próximos días pueda subir igualmente el precio de los cigarrillos. Un movimiento que, con toda probabilidad acometerá también British American Tobacco (BAT), la dueña de Lucky Strike. El mercado de cigarrillos ha registrado unas ventas de 763,96 millones de cajetillas hasta abril, lo que supone un descenso del 14,1 por ciento respecto a un año antes, por las que se facturó 3.139,5 millones de euros, un 7 por ciento menos, según datos publicados por el Comisionado para el Mercado de Tabacos. Frente a este retroceso, el tabaco de liar creció un 46,4 por ciento en volumen, hasta 2,30 millones de kilos, con un alza en valor del 67,7 por ciento, hasta 340,97 millones de euros, en un entorno de crisis económica marcado por el enfriamiento del consumo. La industria tabacalera insiste, no obstante, en que el gran problema está siendo el contrabando, que ha disparado ya hasta el 12 por ciento a nivel nacional, y que en algunas provincias, sobre todo en Cádiz, supera incluso el 30 por ciento del total de las ventas.