La filial española del gigante alemán Siemens ha presentado un Expediente de regulación de empleo (ERE) para expulsar a un máximo de 135 personas, que equivalen al cuatro por ciento de su plantilla. Siemens declara que los despidos se enmarcan en su Plan 2014, con el que se persigue mejorar la eficiencia de su negocio, así como su competencia y sostenibilidad. Para ello, va a proceder a la clausura de sus sectores no rentables. La compañía ha anunciado ya el cierre de su negocio solar y la venta del de soluciones para la gestión de equipajes en aeropuertos y tecnología postal. El ERE ha sido presentado después de agotar el resto de vías alternativas: recolocar a trabajadores, ofrecer jubilaciones anticipadas, reducir la jornada laboral y fomentar la movilidad nacional e internacional. Con estas medidas se ha conseguido reducir en cierto grado el número total de afectados. La empresa negociará con los sindicatos en el periodo posterior a la presentación oficial del Expediente.