El FMI no sólo está preocupado por el empleo en nuestro país, vital para la recuperación de la economía, sino que también teme la sequía del crédito, especialmente para pequeñas y medianas empresas. Según relató el jefe de la misión del organismo internacional, James Daniel, ha podido constatar que unas de las peticiones unánimes en todos los agentes era la vuelta del flujo crediticio en su gira por Madrid, Barcelona, Valencia y Sevilla. Por ello, entre las medidas que urge a España a implantar se encuentra la puesta en marcha de un programa de avales públicos para que la banca reactive los préstamos, como en los que ofrece el Instituto de Crédito Oficial (HICO). "Hay que eliminar cualquiera restricción de la oferta mediante el desarrollo de mecanismos bien diseñados de garantía y asunción compartida de riesgos orientados al crédito a pymes", señala el FMI en su punto número doce del informe de conclusiones sobre nuestro país. Daniel señaló que los bancos tienen aversión al riesgo como consecuencia de la crisis financiera y económica, por lo que será necesario un plan del Estado para reducir ese miedo de las entidades a prestar con un sistema de avales que cubra parte del dinero en caso de impago por parte del cliente. Este tipo de garantía es una de las reclamaciones que la banca pide constantemente y que en el actual programa del ICO no se ha incluido de momento. Las distintas líneas del Instituto Oficial previstas para el presente ejercicio, por importe de 22.000 millones, no disponen de estos instrumentos. Al comienzo de la crisis, el Gobierno de Zapatero sí introdujo estas herramientas en la movilización de dinero a través del ICO, hecho que incentivó a la banca a utilizar esta vía a la hora de conceder préstamos a pymes y autónomos. En el sector financiero se espera que los 22.000 millones para 2013 no se usarán en su totalidad, según los resultados de los primeros meses del año. El FMI también puso de relieve su preocupación ante la petición de unos tipos de interés superiores para las empresas españolas en los mercados que otras europeas.