Su planta navarra eligió ayer un convenio por referéndumMadrid. Al Grupo Volkswagen le han salido bien las cosas este semestre desde los puntos de vista industrial, comercial y sobre todo financiero.En los seis primeros meses del año obtuvo unos beneficios netos de 1.186 millones de euros, lo que supone triplicar la cifra del mismo periodo del año anterior. Además, los nuevos productos de sus marcas, sobre todo Volkswagen, Audi y Skoda, están teniendo buena acogida en Europa, donde sus ventas crecieron un 7 por ciento en los seis primeros meses del año. Con todo, las ventas mundiales crecieron un 12,7 por ciento, lo que le ha reportado unos ingresos por ventas un 14,4 por ciento superiores.El plan de reestructuración que está aplicando en Alemania (recortes de plantilla y pago de indemnizaciones) pasó evidente factura a los resultados operativos, que bajaron un 22,9 por ciento en este primer semestre hasta los 1.034 millones de euros.Sin embargo, no son lo suficientemente buenos para Bernd Pischetsrieder, presidente del grupo, quien sigue descontento con los resultados del grupo de marcas de Audi, en el que se integra Seat. Los resultados de la filial española siguen siendo "insatisfactorios" a pesar de la fortaleza de las ventas del Seat León.Navarra ya tiene convenioPasaron 19 meses desde que la planta de Volkswagen en Navarra inició las negociaciones para la elaboración de un nuevo convenio colectivo. El comité de empresa celebró ayer un referéndum a través del cuál la plantilla debía decidir entre dos propuestas, una de UGT y otra de la dirección con la que CCOO estaba de acuerdo, o ninguno de los dos en último caso.En la consulta, que tuvo una participación de 2.523 trabajadores (algo más de la mitad de la plantilla), salió elegida la última propuesta de la dirección.La opción ganadora, que ambos sindicatos se comprometieron a firmar, supone asegurar durante dos años un incremento del salario del 7,5 por ciento e implica el compromiso de la dirección de abrir una mesa negociadora para estudiar el plan industrial que garantice el futuro de la planta con el nuevo modelo del Polo, la producción y la plantilla necesaria, según informa CCOO.