Las farmacéuticas de medicamentos genéricos Teva y Sun deberán pagar 1.600 millones de euros para zanjar el conflicto legal que mantenían desde hace casi diez años con las farmacéuticas Pfizer y Takeda, que acusaron a las dos firmas de violar la patente en Estados Unidos de uno de sus medicamentos para tratar el reflujo gástrico, denominado Protonix. Según el acuerdo alcanzado entre las empresas, Pfizer obtendrá el 64 por ciento de los ingresos -unos 1.000 millones de euros- por la conciliación, mientras que Takeda recibirá el resto. La israelí Teva desembolsará 1.200 millones de euros y la india Sun otros 400 millones por haber infringido la patente del principio activo de Protonix cuando lanzaron en 2007 y 2008 sus versiones genéricas de ese medicamento, según anunció ayer Pfizer, la primera compañía farmacéutica del mundo.