La nacionalización de Bankia va a traer cambios. La entidad ha cambiado sus estatutos sociales para introducir modificaciones. Una de ellas afecta a la ciudad de Valencia, que acoge la sede social fruto de un guiño que realizó Caja Madrid en su fusión con Bancaja. A partir de ahora, si los accionistas dan su consentimiento, Valencia podría perder el acto de celebración de la junta general. Los nuevos estatutos sostienen que esta asamblea "se celebrará en el lugar que indique la convocatoria dentro del término municipal en que tenga su domicilio la sociedad. No obstante, la junta podrá celebrarse en Madrid si así lo dispone el consejo de administración con ocasión de la convocatoria". Otro de los cambios es la reducción del número de miembros de la Comisión Ejecutiva y de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones, así como la creación de la figura del consejero independiente coordinador. Así, apuesta por recortar el número de miembros de la Comisión Ejecutiva y fijarlo en un mínimo de 5 y un máximo de 7, frente al mínimo de 7 y máximo de 11 que existe en la actualidad. Los intergrantes de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones, por su parte, no podrán superar los cinco ni ser menos de 3, frente al máximo de 7 establecido en los estatutos que todavía están en vigor.