Tras los recortes, el agujero se reduce desde los 3.000 millones previstos y aseguran que ya está controladoLa Comisión Nacional de la Energía (CNE) remarcó ayer que el déficit del gas está controlado gracias a las diferentes medidas puestas en marcha por el Departamento que dirige José Manuel Soria, entre ellas el retraso en la puesta en marcha del almacenamiento subterráneo Castor, en Castellón. En concreto, el regulador afirma que ha cambiado "sensiblemente" la evolución de este agujero, ya que pasa de ser creciente y llegar a los 3.000 millones en el periodo 2012-2020, a preverse en estos momentos un máximo de 882 millones en 2016 y ser decreciente desde entonces, "siempre y cuando no haya desvíos significativos sobre los supuestos contemplados". No obstante, la CNE no quita importancia a esos 882 millones, ya que el déficit todavía representaría el 24 por ciento de la retribución de 2016. El organismo que preside Alberto Lafuente destaca que la sostenibilidad económica a medio plazo podría conseguirse con una senda de actualización alcista, al menos en línea con el IPC, en los peajes (parte regulada del recibo) del periodo 2014-2020. Cabe recordar que en las medidas adoptadas para corregir este déficit ya se subió la tarifa del gas un 5 por ciento en marzo del pasado año. No obstante, habría que tener en cuenta en qué entorno se mueven los precios finales de gas en España y el impacto que tendría su incremento en la economía productiva (demanda gas). El nuevo escenario de equilibrio en el sistema gasista se ha alcanzado a costa de una subida relativa en el precio del gas en España. La CNE calcula que el precio final ha pasado de estar por debajo de la media de la UE a situarse en la media para el consumidor industrial y en la zona alta para el consumidor industrial. Además del retraso para el Castor, el Gobierno también redujo notablemente la retribución definitiva de las plantas de regasificación y de las estaciones de comprensión. Actualmente, la retribución más importante pendiente de reconocer son las instalaciones singulares, como el gasoducto submarino a Islas Baleares. Asimismo, queda pendiente de reconocer las cantidades devengadas en 2012 por el almacenamiento de Marismas.