El buen desarollo del evento es una pieza clave de cara a la candidatura olímpicaMadrid dejó ayer de estar pendiente de una raqueta. La undécima edición del Mutua Madrid Open echó ayer el telón tras unos días de nervios, esfuerzos, profesionalidad, victorias y derrotas. Y, si la victoria de Nadal ha dejado un gran sabor de boca, no menos importante es el monto total del impacto económico que el Open ha dejado a la economía madrileña: unos 110 millones de euros en toda la región. La competición, además, ha creado más de 8.000 puestos de trabajo, 5.300 de ellos en el propio torneo. El diez por ciento de esos 110 millones de impacto en la economía madrileña ha regresado en forma de impuestos a las arcas públicas de las tres administraciones, "lo que supone un importante retorno para el Ayuntamiento". Además, tal y como señaló Botella la semana pasada, "para lograr ese impacto económico, es importante que el torneo tenga continuidad en el tiempo, algo que hemos logrado gracias al respaldo municipal y al de la iniciativa privada. Gracias, especialmente, a Mutua Madrileña". Este año no ha habido experimentos de colores en la Caja Mágica. Las pistas del torneo de Madrid, situado muy cerca de Grand Slam de tierra, Roland Garros, eran de polvo de ladrillo, la tierra roja tradicional, después de la experiencia del pasado año sobre tierra azul. Fue tanto el empeño que se puso en borrar la imagen de la última edición que el material básico de las pistas, -el craón, una especie de piedra caliza, volcánica, permeable y capaz de absorber la humedad, con un total de 1.800 toneladas para todas las pistas, a razón de entre 80 y 100 por cada una de las 17 pistas existentes en el recinto de la Caja Mágica- proviene de una cantera al norte de París, curiosamente como se hace Roland Garros. Es más: los operarios trabajaron durante ocho meses en la construcción de las nuevas pistas, concretamente desde septiembre de 2012. Durante este tiempo, no sólo se renovó la superficie, sino que se instaló un nuevo sistema de drenaje. Y otra buena noticia: estas pistas, con un coste superior al millón de euros, no tienen que empezar a desmontarse hoy. Y más cifras: Madrid es generosa con sus participantes, ya que este torneo -exceptuando Roland Garros- es el que mejores premios reparte: más de 600.000 euros se han llevado los ganadores en cada categoría. La mitad, los finalistas. Los más de 250.000 visitantes han sido atendidos por 660 voluntarios -la organización les ha recompensado con entradas- que han visto trabajar a 105 jueces de línea, 160 niños recogepelotas -y 30 modelos para los partidos de televisión-, 60 azafatas para organizar a los visitantes de los palcos, 200 miembros de seguridad… y han visto rodar más de 20.000 pelotas amarillas. Recta final de Madrid 2020 Ana Botella es consciente de la importancia de que el evento haya salido bien justo en el final de la recta por la candidatura olímpica. "El Master es la mejor muestra del prestigio deportivo de Madrid, de sus infraestructuras y de la capacidad de personas, empresas e instituciones para ofrecer al mundo los mejores Juegos Olímpicos. Madrid está más preparada que nunca", señaló la pasada semana.