La cotizada sevillana alerta del efecto de las multas a las casas vacías en el sectorInmobiliaria del Sur comienza a ver la luz tras el duro año 2012, que le llevó a registrar sus primeras pérdidas en casi 70 años de historia de esta firma familiar cotizada. El grupo sevillano que preside Ricardo Pumar ha elevado ingresos, por el inicio de la construcción de dos promociones de viviendas de protección oficial en Córdoba (66 unidades) y Sevilla (40), y reducido pérdidas netas en el primer trimestre del año más de un 70 por ciento respecto al mismo periodo de 2012. Por el lado de los ingresos, el crecimiento deriva de la construcción de esas viviendas a través de una empresa participada. Insur se anota la parte proporcional de los ingresos en relación a su porcentaje de participación -en este caso, un 60 por ciento-. Los 2,6 millones que llegan por esta vía contrastan con los apenas doscientos mil euros del mismo periodo de 2012. Compensan además la reducción de la facturación por la actividad de alquiler, que decrece hasta 3,6 millones en el trimestre (un 8 por ciento menos) debido a la renegociación a la baja de los contratos en vigor, no por desocupación de espacios, detalla Pumar a elEconomista. La tercera vía de ingresos, la de venta de vivienda, crece ligeramente hasta el millón de euros. La compañía señala que tiene ventas comprometidas, pero no cerradas totalmente a final del trimestre, por valor de 3,9 millones que se incluirán en la cuenta de resultados antes de final de 2013. A cierre de marzo del pasado año, el importe de esas ventas no cerradas aún era de 11,8 millones. El presidente señala que a cierre del primer semestre la empresa ofrecerá información más detallada para poder tener una idea más aproximada de cómo irá el año. El incremento total en los ingresos no se traduce en el abandono de las pérdidas debido a que el margen de la facturación por construcción de vivienda es muy reducido. Por último, Pumar señaló que el Decreto-ley de Función Social de la Vivienda, que el Parlamento andaluz aprobó la semana pasada, afecta a la financiación de las nuevas promociones, ya que la previsión de que los promotores sean multados si las viviendas no se venden -y se quedan vacías seis meses seguidos- dificulta aún más el lograr crédito.