BBVA ha vendido su sede en París por 32 millones de euros a un inversor financiero, aunque permanecerá en ella en régimen de alquiler, lo que se conoce como sale & lease back, informó ayer la entidad. Situado en el número 29 de la Avenida de la Ópera, cerca del Museo del Louvre y en uno de los barrios más cotizados de la capital francesa, el edificio ocupa una superficie de unos 2.000 metros cuadrados. El grupo español, que no ha desvelado el comprador, explica que la operación forma parte de la estrategia que inició hace seis años de "optimizar la cartera de activos inmobiliarios". Para el responsable de BBVA en Francia, François Wohrer, la venta de la sede histórica es una "excelente operación", "realizada en lo más alto del ciclo inmobiliario". Asimismo, añade, "cumple con los objetivos del grupo".