El Banco de España debe ratificar antes del 22 de mayo su idoneidad para el cargoEl Consejo de Ministros ha dado luz verde al decreto de honorabilidad para directivos bancarios, una norma que traspone la directiva impulsada por la EBA (Autoridad Bancaria Europea) y que da aire al consejero delegado del Santander, Alfredo Sáenz, cuya idoneidad como banquero debe ser estudiada por el Banco de España. Por otro lado, el decreto eleva los criterios sobre la idoneidad para ser banquero, ya que además de la trayectoria profesional se debe tener en cuenta la formación teórica en banca y en finanzas. Tras la entrada en vigor del decreto, las fuentes jurídicas consultadas no dudan de que el número dos del Santander podrá continuar en su cargo sin temor a que un asunto judicial que se remonta a casi dos décadas fuerce su salida. Sáenz fue condenado por la Audiencia Provincial de Barcelona a una pena de seis meses por un delito de denuncia falsa que se remonta a su etapa como consejero delegado de Banesto. Posteriormente, el Supremo aceptó parcialmente los argumentos del recurso de Sáenz y rebajó la condena a tres meses de arresto, si bien añadió a esta pena la de inhabilitación. El 25 de noviembre de 2011, el Gobierno en funciones de Rodríguez Zapatero, a petición del Ministerio de Justicia, concedió un indulto parcial a Sáenz y conmutó la pena de tres meses de arresto mayor y la de inhabilitación por la pena máxima prevista en la legislación aplicable al caso, cuyo tope son 3.000 euros. Asimismo, suprimió sus antecedentes penales. Esta última parte, la coletilla que añadió el Ejecutivo al indulto sobre la supresión de los efectos administrativos de la condena, fue anulada en febrero pasado por el Tribunal Supremo, que entendió que el Gobierno "se extralimitó" al hacerlo, por lo que mantuvo los antecedentes penales de Sáenz. En esta situación, la continuidad del consejero delegado dependía de si el Banco de España examinaba su honorabilidad bien con lo dispuesto por el Real Decreto 1245/ 1995 o por el recién aprobado por el Consejo de Ministros. Mientras el primero establecía que carecen de honorabilidad los banqueros que "tengan antecedentes penales por delitos dolosos", el nuevo decreto flexibiliza el criterio anterior al introducir hasta siete circunstancias que deben tenerse en cuenta al examinar la idoneidad. Muchas de ellas son aplicables al caso de Sáenz, uno de los banqueros más reputados de todo el sistema. Entre ellas, el tiempo transcurrido desde que ocurrieron los hechos o la gravedad de la condena o pena impuesta. El Banco de España ya informó en marzo que había iniciado el proceso para examinar la idoneidad de Sáenz y tras la aprobación ayer de la normativa cuenta hasta el 22 de mayo para comunicar si la cúpula del Santander y del resto de bancos cumplen con los requisitos de honorabilidad y de profesionalidad que impone la norma. La institución, según el nuevo decreto, debe recabar la opinión del tribunal que juzgó al directivo sobre su honorabilidad. Es un paso preceptivo, pero el informe no es vinculante para el Banco de España, que es quien tiene la última palabra.