Nokia y Microsoft, junto a otras empresas, han incrementado la presión sobre los reguladores de la Unión Europea para que tome acciones contra Google, compañía a la que acusan de bloquear la competencia en el mercado de telefonía móvil. La queja de las empresas ocurre en momentos en que Google intenta resolver una investigación de dos años por parte de la Comisión Europea sobre sus prácticas en las búsquedas de Internet y evitar así una posible multa de hasta 3.800 millones de euros, o un 10 por ciento de los ingresos de 2012. Más de una decena de empresas han presentado argumentos frente a la Comisión cuestionando las prácticas de búsqueda de Google, según informa Reuters. El objetivo inicial de la investigación estuvo en el motor de búsquedas para ordenadores de sobremesa, pero el comisario de competencia de la Unión Europea, Joaquín Almunia, dijo el año pasado que había recibido solicitudes sobre la plataforma Android de Google, el sistema operativo más popular para teléfonos avanzados.