Los continuos cambios de imagen no logran animar las ventas del 'icono' del juguetenueva york. Mattel se mostraba bastante satisfecho cuando presentaba unos resultados para el segundo trimestre del año por encima de lo esperado, pero tenían truco... la reducción de los impuestos de los que se benefició la firma juguetera evitó que los recortes se situaran en los niveles habituales. Aún así, ni los continuos cambios de imagen ni su infinita lista de profesiones hacen resucitar a uno de sus productos más preciados: la muñeca Barbie que a sus 50 años ha visto como a medida que aumenta su edad se reduce las ventas mundiales de la firma juguetera. Esta caída supone el undécimo trimestre de pérdidas para las franquicias de la rubia más conocida del mundo. Sorprendentemente dentro del territorio norteamericano, la salida a la venta de varias películas protagonizadas por la muñeca parecen haber engatusado al público infantil y, por eso, durante los tres últimos meses las líneas de Barbie Mermaidia y Princesa registraban una subida del 2 por ciento en sus ventas. A pesar de este ligero desahogo, el consejero delegado de la compañía, Robert Eckert, declaraba en una conferencia con analistas que "todavía es pronto para cantar victoria". El fabricante de juguetes, con base en la mítica ciudad de El Paso (California), ha visto como durante el segundo trimestre del año sus ventas subían un 8 por ciento hasta alcanzar los 957,7 millones de dólares, mientras que sus ingresos netos ascendían a 37,4 millones de dólares frente a las pérdidas cercanas a los 94 millones registradas durante el mismo periodo de 2005. PérdidasOtra de las fuentes de pérdidas de Mattel es su famosa marca de cohes de juguete Hot Wheels, cuyas ventas han caído en torno al 7 por ciento durante el periodo.La rubia hace, por tanto, perder la cabeza a los responsables de la firma juguetera, que no termina de encandilar a los nuevas generaciones a pesar de los nuevos productos que lanza al mercado. En cualquier caso, se roza un moderado optimismo tras once trimestres consecutivos de pérdidas.