Supedita el beneficio de 2013 a ganar dimensión tras aumentarlo el 5,7% en 2012Crecer y comprar... aunque limite el beneficio. Mutua Madrileña abre las fauces para arrebatar cuota de mercado, sobre todo en autos, y prepara su desembarco en Latinoamérica, previsiblemente a través de Colombia, tras sellar un 2012 con aumentos del 5,7 por ciento en ganancia y avances en todas las líneas de negocio. "Este año vamos a tratar de empatar, con los mismos resultados e ingreso de 2012 (…) Si tenemos que sacrificar algo de rentabilidad por cuota -en seguros de autos- lo vamos a hacer", desveló ayer su presidente, Ignacio Garralda, fijando de forma diáfana prioridades. La aseguradora, que fácilmente ocuparía el puesto número 17 ó 18 por activos en un Ibex de cotizar en bolsa, ganó 189,3 millones de euros el pasado año, impulsada por su participada SegurCaixa Adeslas -aporta el 31 por ciento del total- y avances en el resto de líneas de negocio. Garralda calificó de "bastante satisfactorio" elevar casi un 6 por ciento el beneficio en un contexto de "dificultad extrema" y para una empresa ubicada solo en España. Una clave: sus ingresos por primas crecieron un 4,8 por ciento frente a la contracción del 5,3 por ciento en el conjunto del sector, propulsados por SegurCaixa Adeslas, aunque batió a sus rivales también en autos, el nicho tradicional de Mutua. Otra clave: el ratio combinado o parte de los ingresos que consumen los gastos operativos y siniestros mejoró del 92 al 90,9 por ciento en No Vida y empeoró en autos desde el 92,5 al 94,5 por ciento. Y elevó el margen de solvencia a una cifra equivalente al 862 por ciento del mínimo exigible por ley a nivel grupo -con SegurCaixa Adeslas- y del 2.118 por ciento en el balance individual de Mutua. Una "holgura magnífica para acometer cualquier tipo de operación", refirió Garralda, que cifró en 2.400 millones el colchón en inversiones financieras susceptibles de utilizar para efectuar operaciones corporativas sin necesidad de echar mano de endeudamiento alguno. Parte de la despensa serían unos 500 millones de euros en los que desea reducir su actual exposición inmobiliaria, adquirida en un momento en el que las aseguradoras realizaban casi toda su inversión en ladrillo. De los 5.830 millones en inversión, 1.400 millones son propiedades en edificios. "Buscaremos oportunidades de desarrollo corporativo sea en España o fuera de España, como garantía de crecimiento estable y sostenible", declaró. Fuera de las fronteras se encuentra en proceso de contratación de un despacho de abogados y un banco de inversión para explorar oportunidades. Su foco está en Colombia, Perú y México, aunque se decanta por el primer mercado por su dimensión -Perú es demasiado pequeño y México grande para arrancar la internacionalización-. El plan es entrar de la mano de socios locales en compañías de auto o salud, dependiendo de las oportunidades que surjan y la regulación local. Garralda desveló el deseo de iniciar contactos a la vuelta del verano, con vistas a cerrar la transacción en 2014. En España, descarta pujar por negocios de Cahispa pero estudiará acudir a la privatización de la compañía de seguro de crédito Cesce y espera que las antiguas cajas pongan en venta alguna gestora que ayude a su filial Mutuactivos a dar el saldo de dimensión que desea. Al margen de operaciones, la apuesta clara es que vaya "arañando" cuota de mercado a la competencia. Sobre todo en autos, donde está dispuesto a sacrificar rentabilidad y compensar ese deterioro con otros ramos o negocios fuera de España para ganar dimensión. "No tenemos intención de subir las primas", señaló Garralda, en prueba de su decisiva ofensiva.